jueves, 25 de abril de 2013

La Champions de Lewandowski

Cuando Eliseu marcó el 1-2 en Dortmund, en el minuto 82 del partido de vuelta, pensé que era el fin de una bonita historia. Tenía que caer uno de los dos y creía que ese gol acababa con una Champions League formidable del equipo de Jürgen Klopp. Habían sido campeones en un grupo dificilísimo -y estuvieron muy cerca de ganar en Madrid y Manchester- y habían eliminado a un muy buen Shakhtar Donetsk, a pesar de la venta de Willian. Entonces creía que me tocaría escribir sobre este equipo y no un homenaje a la actuación europea del Málaga, pues ignoraba lo que ocurriría en los diez minutos posteriores. En ese momento, tras el 1-2, decidí que me centraría en una figura en particular, Robert Lewandowski, aunque el inesperado desenlace me hizo cambiar de opinión.

El delantero polaco cuajó una eliminatoria sensacional contra el Málaga. Posiblemente fue el mejor jugador de su equipo en ambos partidos. Su lucha contra la defensa malacitana en La Rosaleda fue emocionante, ganó muchísimas acciones, sobre todo recibiendo de espaldas, y permitió dar continuidad al juego de su equipo. Estaba en todos lados, ganaba los duelos aéreos y casi siempre llegaba antes que su marcador, como también sucedió en el encuentro de vuelta. En el segundo partido creó muchísimos problemas, incluso más que en el de ida, y buscó constantemente el lado de Sergio Sánchez, el central más débil de la defensa de Pellegrini. Además, marcó el primer gol de su equipo en un contraataque impecable.

Sin embargo, ayer Robert Lewandowski superó todas las expectativas y anotó cuatro goles en un partido de semifinales de Champions. Cuatro tantos para culminar una actuación portentosa en la Copa de Europa, pase lo que pase en el partido de vuelta en el Bernabéu. Si el control y la posterior definición en la jugada del 2-1 ya eran una maravilla, la maniobra del polaco para marcar el 3-1 quedará en la memoria como una de las acciones más bellas de esta edición de la Champions League. Una exhibición que se suma al buen rendimiento visto en la fase de grupos, octavos y cuartos de final. El broche final espera en Wembley... siempre que el Borussia Dortmund resista durante 90 minutos en el Bernabéu.

martes, 16 de abril de 2013

Apuntes de la Eredivisie: Demouge, el último refuerzo del Roda

Frank es un delantero de 190 centímetros al que le cuesta mover su cuerpo. Es un delantero torpe que jamás ha superado la quincena de goles en la Eredivisie y que ha pasado por media docena de clubes neerlandeses, tanto de primera como de segunda división. Aun así, llegó a jugar regularmente como titular en el Utrecht de Vorm, Strootman, Mertens y Van Wolfswinkel, pero apenas coincidió durante una temporada con esa generación. El equipo se descompuso hace casi dos años y Frank Demouge, tras una discreta temporada, decidió emigrar a Inglaterra el pasado verano.

Le esperaba la sureña Bournemouth y un equipo de League One. Pero Demouge se lesionó nada más llegar a Inglaterra y no logró hacerse un hueco en el equipo. Sólo jugó dos partidos entre septiembre y octubre, ambos como titular, pero a los once minutos del segundo encuentro tuvo que ser sustituido. Decepcionado Demouge y resignada su afición, regresó, en condición de cedido, a la Eredivisie.

Desde que regresó para jugar en el Roda ha jugado siete partidos y ha anotado cinco goles. El último consistió en empujar un balón en el área pequeña. Pero ahí estaba, pues tuvo que adelantarse al checo Kalas para llegar antes que él al balón. Marcó el 2-3 ante el Vitesse e hizo creer a su equipo en una remontada que culminarían en el descuento. Se peleó con los centrales y sembró el pánico en la defensa del equipo de Rutten, que no supo como pararle. No siempre bajaba el balón, a menudo ni siquiera tocaba el esférico, pero lograba que los defensores no lo despejaran. En los Países Bajos, Frank sigue siendo un delantero torpe y lento. Sin embargo, se siente útil.

sábado, 13 de abril de 2013

La Copa de Callum

Empezó como un futbolista habitual en las primeras rondas coperas pero sin demasiado peso en el equipo para acabar siendo, unas pocas semanas más tarde, un fijo en el once inicial del Wigan Athletic. Así,  McManaman se ha ido consolidando poco a poco hasta convertirse en uno de los jugadores más en forma del equipo. Le sucede como al Wigan en esta FA Cup: ha pasado de tener un rol secundario y prácticamente residual, al que no se le prestaba demasiada atención, a dar las sorpresa y estar a un paso de hacer algo grande.

Callum McManaman ha sido, junto a Jordi Gómez y Maynor Figueroa, el único futbolista del Wigan que ha jugado los seis partidos de la FA Cup como titular. Aunque en uno, contra el Huddersfield Town, creía que no lo iba a ser. De hecho, el día anterior al partido, Roberto Martínez le dijo que no formaría parte del once titular para disipar su nerviosismo. Sin embargo, acabó jugando los noventa minutos y antó el primero de los cuatro goles del Wigan. Desde entonces no ha dejado de crecer. Empezó a tener minutos de verdad en la Premier League y siguió jugando la FA Cup como titular. Además, una soberbia actuación ante el Everton en los cuartos de final, con gol incluido, le consolidó en la formación inicial de los latics. Y ya no ha vuelto a sentarse en el banquillo.

Hoy el Wigan Athletic se ha clasificado para la final de la FA Cup y Callum McManaman ha sido uno de los mejores de su equipo. Ha anotado el segundo gol, el que setenciaba el encuentro a falta de doce minutos para el final, pero ha aportado mucho más. Empezó en la banda derecha y acabó en la izquierda, pero siempre buscó encarar al defensor rival. Regateó hacia fuera, centró, forzó algunos córners, chutó varias veces y hasta marcó un tanto. Se mostró como un futbolista muy activo que, al recibir pegado a la línea de banda, ofreció alternativas al juego del Wigan, de mucho toque y posesión por el carril central.

Callum no fue el mejor del equipo, pues Maloney, Koné y Jordi Gómez rindieron a un nivel altísimo, pero se está erigiendo como un futbolista importantísimo dentro de la plantilla. Esta final de la FA Cup es una hazaña de todo el equipo, pero él la recordará de un modo especial. Posiblemente como el torneo que hizo despegar su carrera.

viernes, 12 de abril de 2013

Dos extranjeros en Södertälje

Este texto fue redactado a finales de julio del año pasado, retocado y ampliado en diciembre y revisado en abril. En su momento no salió a la luz y aprovecho ahora, cuando apenas se han jugado un par de jornadas de la liga sueca, para publicarlo en Ojeador Internacional.

Södertälje es una ciudad sueca situada a unos 30 kilómetros al sur de Estocolmo. Es famosa a nivel mundial por ser el lugar de nacimiento de Björn Borg, uno de los tenistas más grandes de todos los tiempos. Pero Södertälje también es conocida por acoger una de las comunidades de inmigrantes más numerosas en Suecia, la aramea. Esta comunidad semita vivió en parte de la antigua Mesopotamia, en regiones ahora pertenecientes a países como Turquía, Iraq o Siria. La ciudad de Södertälje acoge a muchísimos immigrantes de esa región del mundo y, más allá de los arameos, también son importantes otras comunidades como la asiria.

La mejor manera de ejemplificar la importancia de estas comunidades en Södertälje es citar los cinco templos dedicados al culto religioso que encontramos en la ciudad o los dos canales de televisión dirigidos hacia la misma comunidad. Además de los dos grandes clubes de fútbol del municipio, también fundados por inmigrantes de esa región. Estos equipos no han sido especialmente exitosos a nivel nacional, pero ambos han llegado a jugar en la Allsvenskan, la primera división del país. De hecho, el Syirianska FC fue fundado por immigrantes arameos mientras que al Assyiriska Föreningen lo crearon suecos de origen asirio.

El primero de los dos clubes "extranjeros" que se fundó -y también el primero en jugar en la Allsvenskan- fue el Assyriska Föreningen. La fundación del club asirio llegó en 1971, pero hasta 1974 no se formó el equipo de fútbol. El Assyriska fue progresando a través de las distintas categorías del fútbol sueco hasta llegar a la Superettan, la segunda división, en 1992. Logró estabilizarse en esa categoría en la década de los 90 y protagonizó su primera gran hazaña en la élite en 2003, cuando perdió ante el Elfsborg la final de Copa por 2-0. La medalla de plata siempre es amarga, pero con el paso del tiempo no lo puede ser para lo que entonces era un club de Segunda División.

Al año siguiente llegó un nuevo éxito para el Assyriska, pues ascendió a la Allsvenskan por vez primera en su historia. La temporada en Primera no fue tan buena como se hubiese deseado, pero el club y sus raíces se dieron a conocer. Ese mismo 2005 se rodó el documental Assyriska: A National Team Without a Nation de Nuri Kino –periodista sueco de origen asirio- que trataba la historia de la institución, la masa social que lo seguía y lo que significaba ese club para el pueblo asirio, que no tenía una selección que le representase pero sí un equipo de fútbol en Suecia. Poco a poco se iba conociendo su peculiar historia.

El equipo que representó al Assyriska en la Allsvenskan tenía a varios futbolistas suecos de origen asirio como David Durmaz, Stefan Batan, Andreas Haddad o Eddie Moussa. Ellos constituían un grupo con varios representantes de lo que es la realidad social sueca en forma de futbolistas nacidos ya en Europa pero de padres y orígenes bien lejanos. Un reflejo del verdadero Assyiriska.

Desafortunadamente, el Assyriska no cuajó una buena temporada en la Allsvenskan. Cuatro victorias, dos empates y veinte derrotas les condenaron al último puesto de la clasificación. Una bonita experiencia que, sin embargo, dio a conocer a este equipo a muchos países del mundo, a más de ochenta con población de origen asirio. Luego se produjo otro descenso, pero el equipo se recuperó rápidamente. Ahora forma parte de la zona media de la Segunda división sueca pero, no obstante, tanto internet como la televisión han difundido el legado social de este club, cada vez más conocido. Ya no sólo tiene aficionados en Södertälje, sino que el Assyriska también llega a otras partes del mundo como Estados Unidos o Siria, donde se encuentra el lejano origen de esta institución. De hecho, el club está planeando expandirse con algo parecido a un equipo satélite en Estados Unidos.

Ya sólo quedan dos de los miembros asirios de la plantilla que disfrutó de la Allsvenskan: David Durmaz y Stefan Batan. También está Christer Youssef, otro futbolista con orígenes en esa misma región, pero en esa época era demasiado joven. Actualmente la plantilla está formada por menos asirios que antes, aunque la identidad del club se mantiene con esos tres futbolistas como referentes. En cualquier caso, tienen menos jugadores con raíces en esa región que el otro equipo de la ciudad, con el que además comparten estadio.

El Syrianska FC fue fundado, bajo el nombre de Suryoyo Sportklubb, por un grupo de aficionados arameos unos años más tarde que el Assyriska Föreningen. Nació en 1977, pero no fue hasta 1986 cuando adoptó el nombre actual de Syrianska FC. Su escudo incluía el símbolo alado propio de la bandera aramea, los colores de la misma, y el origen del club -inscrito en el mismo escudo en arameo- explicitando así la relación del actual Syrianska con dicha comunidad. El Syrianska FC siguió una progresión similar a la del otro equipo de la ciudad, aunque algo más lenta. Poco a poco se fueron superando divisiones hasta estabilizarse en Tercera, donde el club compitió durante muchos años. Se rozó el ascenso en distintas ocasiones, pero sin suerte hasta 2008, cuando se consiguió la promoción a la Superettan. Un par de años más tarde llegó el ansiado ascenso a la Allsvenskan. En 2010, seis años después, Södertälje volvía a tener a un equipo en la máxima categoría del fútbol sueco.

Uno de los pilares del éxito del Syrianska fue el manager del equipo, especialmente implicado en la causa. Özcan Melkemichel fue jugador del Syrianska en la década de los ochenta y a partir de 2003 se vinculó de nuevo a su club. Se convirtió en una figura de particular relevancia en 2005 al asumir el puesto de manager, rol que aún ostenta. Aunque, evidentemente, él lleva tantos años vinculado con el Syrianska por su ascendencia aramea, como varios de los futbolistas que conforman la plantilla de su equipo esta temporada.

Otro ejemplo es el capitán del equipo, Suleyman Sleyman. Nombre y apellido ya revelan que sus orígenes se encuentran lejos de Suecia, en este caso en tierras arameas. No obstante, él nació en Suecia, precisamente en Södertälje, lo que le convierte en uno de los ídolos locales. Su historia es la de un futbolista que debutó con el club que representa sus orígenes para marcharse posteriormente al Hammarby -donde jugó durante muchos años, ganó una liga y hasta debutó con la selección absoluta sueca- y acabar volviendo al club de toda su vida, donde ahora es el capitán.

Una trayectoria similar siguió Louay Chanko, también nacido en Södertälje a pesar de sus orígenes arameos. Debutó con el Syrianska, se marchó para jugar en clubes de mayor nivel (ganó dos ligas), coincidió con Sleyman en el Hammarby, y finalmente regresó a casa en 2012. A diferencia de Sleyman él escogió representar a la selección de sus orígenes, Siria.

Y así se podrían ir completando las historias de la mayoría de los futbolistas de origen arameo o asirio del club, aunque, por ejemplo, Sharbel Touma y George Mourad nacieron lejos de las fronteras suecas. El caso de este último futbolista es algo especial, ya que a pesar de haber jugado un par de amistosos con la selección sueca en 2005, la selección siria decidió convocarlo en 2011. Esta decisión acabó provocando que la FIFA la excluyera de la fase de clasificación para el Mundial de 2014. Sin embargo, en febrero se marchó a China.

Todo esto ha ayudado a internacionalizar la imagen del Syrianska FC, un club mucho más conocido ahora que hace un par de años. No deja de ser un equipo muy seguido en casi todos los lugares del planeta con presencia aramea y lo llamativa que resulta su presencia en la Allsvenskan va alertando cada vez a más aficionados. De momento ya llevan dos temporadas en Primera, mejorando asi la actuación del Assyriska, y la pasada temporada lograron asegurar la permanencia con cierta holgura. Así que si el Assyriska realiza un buen año en la Superettan quizás veamos un duelo entre los dos equipos extranjeros de Södertälje en la primera división sueca más pronto que tarde.

Otros clubes de origen arameo
También hay que añadir que posteriormente aparecieron otros equipos bajo la denominación de Assyriska y Syrianska, pero situados en otras ciudades. Por ejemplo, en la cuarta división sueca están el Assyriska IF de Norrköping, fundado en 1977 por la comunidad asiria, o el Assyriska BK de Västra Frölunda, un barrio de Göteborg. Este segundo club fue creado en 1985. No obstante, ambos están jugando en la cuarta división sueca.

Los Syrianskas suecos tampoco llegan al nivel del equipo de Södertälje, que es el tercero en antigüedad. El primero en nacer fue el Syrianska IF Kerburan, de la ciudad de Västeras, cerca de Estocolmo. Hasta esta temporada eran el mejor de los demás Syrianskas, pero tras jugar varios años en Tercera no se han escapado del descenso a la cuarta división del fútbol sueco. Tambien situado en la zona de Estocolmo se encuentra el Arameiska-Syrianska Botkyrka, fundado en 1980. De hecho, Botkyrka es un barrio de los suburbios de Estocolmo y también tiene a su Assyriska particular.

Otro de los casos más recientes es del Valsta Syrianska, fundado en 1993 y también situado a las afueras de Estocolmo, en Märsta. Tras varios años en Tercera, bajaron a la cuarta división y sólo tardaron una temporada en regresar a la que hasta hace poco había sido su categoría. Querrán celebrar sus 20 años de historia con otro ascenso y quizás así podrán jugar un duelo contra otro club de origen arameo, en este caso uno de los de de Södertälje. No están tan lejos de emular a los dos clubes de la zona con los que comparte lazos familiares.

martes, 9 de abril de 2013

Un equipo para la memoria

El Málaga ha sufrido un golpe durísimo. Una derrota de las que duelen profundamente por la forma como se produce. Y por aquello que impide vivir, pues los malacitanos difícilmente volverán a estar tan cerca de una semifinal de Champions League. El gol en el último segundo del descuento acabó con esa nueva realidad que muchos ya estaban imaginando: otro sorteo, dos partidos más, otro viaje europeo, la oportunidad de soñar con una final en el debut... y el momento en el que todo esto se rompe es muy doloroso.

Sin embargo, el Málaga se ha ganado hoy un pedazo de historia que será recordado durante muchísimo tiempo. Estas hazañas sólo se valoran con perspectiva pasados unos días, semanas, meses e incluso años. Es muy pronto para tratar el impacto que dejará la eliminación en Dortmund, porque antes habrá que ver cómo evoluciona en las próximas temporadas este equipo. Pero, cuanto más lejos se esté de repetir la experiencia de disputar la Champions más se valorará la dimensión histórica de la eliminación de esta noche.

Aunque el equipo de Pellegrini no sólo se ha ganado un lugar en la memoria colectiva. También ha curtido a sus futbolistas a enorme velocidad y ha brindado una última oportunidad a los más veteranos. Ha sido la Champions de Willy Caballero, que casi se convirtió en héroe con varias paradas de enorme mérito. También la de Gámez y Weligton, futbolistas que han pasado de jugar con el Málaga en Segunda a disputar partidos de Champions. O la de Demichelis y Toulalan, que llegaron más tarde pero que aportaron la experiencia y el oficio que nadie tenía en este equipo. Incluso la de Antunes, el último en llegar, y Monreal, que se marchó antes de que empezaran las eliminatorias. Pellegrini, constructor de equipos, es un caso distinto pero también una pieza básica del proyecto malacitano.

Así podría hablar de todos los futbolistas, pero hay que detenerse en los dos genios de este equipo a nivel ofensivo. El primero de ellos es un jugador que ha tenido la oportunidad de reencontrarse y alcanzar de este modo el mejor nivel en toda su carrera, que no es poco. No es tan explosivo como en sus primeros años, pero sabe aprovechar mucho mejor sus virtudes. El segundo es un genio que crecerá muchísimo con experiencias como la de esta Champions League. Ya decidió la primera eliminatoria y apareció hoy en un momento clave que parecía desequilibrar la segunda a su favor. De hecho, hasta fue clave en el debut en la fase de grupos con un golazo en el primer minuto. Es especial y ha demostrado que no suele encogerse. Ambos son la razón por la que el equipo ha podido competir con los mejores. Además de saber sufrir como pocos atrás, son imprevisibles. Son la diferencia entre un equipo más que correcto para competir y uno con potencial para hacer algo grande.

Todos deberían sacar lecturas positivas de la derrota de hoy. Aunque posiblemente no lo van a hacer esta semana ni tampoco la siguiente. Recuperarse de un golpe así lleva su tiempo y ellos lo necesitarán. Pero, tanto a nivel individual como colectivo, lo que hace crecer de verdad son los tropiezos y las derrotas. Y la derrota de hoy es especialmente cruel y dolorosa.

Apuntes de la Eredivisie: Vitesse, ahora o nunca

Todos hemos visto algún torneo de categorías inferiores en el que algún chico destacaba muy por encima de los demás. Fuese porque su físico, desarrollado con especial precodidad, era muy superior oporque era mucho mejor futbolista que el resto. En la Eredivisie Wilfried Bony se ha convertido en una mezcla de ambas cosas. Es un abusón. Juega a placer. Impone su físico para ganar duelos aéreos y proteger el balón cuando le aprietan, pero también es hábil para abrirse espacio dentro de área y disparar con peligro. El pasado sábado volvió a marcar dos tantos.

Los números respaldan a Bony: ha anotado 29 goles en 26 partidos. Él está siendo la pieza clave para que su equipo, el Vitesse Arnhem, esté luchando por el título junto al Ajax, Feÿenoord y PSV Eindhoven. No es casualidad que, desde que regresó de la Copa de África, el Vitesse haya sumado 22 puntos de 24 posibles y que él haya marcado en todos los partidos (14 goles). De hecho, sólo se ha quedado sin marcar en siete encuentros de la Eredivisie.

Wilfried Bony no es el único futbolista de calidad que tiene el Vitesse, pero sí que es el jugador diferencial. Está a la altura de los mejores en los últimos años: Luis Suárez, Dries Mertens, Balasz Dzsudzsák o Graziano Pellè. Se ha convertido en atacante que gana partidos y ha hecho de un buen equipo -formado por jugadores de cierto nivel como Reis, Kalas, van Ginkel, Kashia, van Aanholt o incluso Havenaar- un candidato a ganar el primer título liguero de su historia.

sábado, 23 de marzo de 2013

Un chipriota anónimo

A veces uno se encuentra con futbolistas excepcionales escondidos en equipos de media tabla de alguno de los grupos de la 2ªB española. Entre la multitud de jugadores que participan cada fin de semana en algún partido ignorado por la gran masa hay algunos de notable calidad. Aunque a menudo a muchos de ellos sólo los puedes ver una vez, sobre todo si son del equipo visitante. Entonces es inevitable quedarse con la primera impresión. Simplemente es cuestión de suerte. Puede que ese futbolista zurdo tan técnico te maraville con controles, caños y precisos cambios de juego o que te desespere por su apatía. No serás consciente de su irregularidad y de que quizás ése sea su mejor partido en los últimos 18 meses.

Algo similar sucede con los partidos de las selecciones nacionales. Se juegan muchísimos encuentros en muy poco tiempo y es imposible abarcarlo todo. Y entre tantos equipos hay varios a los que apenas puedes ver, lo que no deja de ser lógico. Además, cada selección llama a futbolistas que acuden desde distintos rincones del mundo. Por esta razón prestar atención a un partido de la selección de Chipre no suele ser un acto habitual en nuestras vidas, a no ser que quien esté leyendo estas líneas tenga familia u orígenes en dicho país.

Pero, precisamente hoy, Chipre ha conseguido un muy buen resultado ante Suiza, la selección más potente de su grupo. Y lo ha hecho gracias a un partido de enorme mérito, porque ha sabido incomodar al conjunto de Ottmar Hitzfeld, sobre todo en la segunda parte. Entonces, tras un primer tiempo bastante entretenido en el que ambos equipos han gozado de ocasiones de gol, Chipre se ha replegado atrás y ha esperado cerca de la frontal del área. Ha reducido los espacios y Suiza ha tenido muchísmas dificultades para generar oportunidades claras, hasta el punto de que sólo sus disparos lejanos entrañaron peligro.

Aquí es donde hay que introducir al nombre del futbolista de la tarde. Demetris Christofi, delantero de 24 años del AC Omonia, ya había completado una notable primera mitad. Había sido el principal socio de un Charalambides muy activo, que contagiaba confianza. Charalambides encaraba y habilitaba a sus compañeros, que a menudo recibían el balón con más espacio gracias a la atracción del futbolista del APOEL. El capitán ejerció de líder, pero el paso del tiempo lo desgastó y agotó sus fuerzas.

No obstante, en un segundo tiempo con un guion muy distinto, Christofi legitimó el plan de su selección. Añadió épica a su actuación. Sus compañeros estaban muy atrás, pero él luchaba cada jugada, trazaba desmarques profundos, ganaba disputas y metros. Recibía el balón, lo aguantaba, hacía que su equipo respirara y luego soltaba la pelota para intentar iniciar un nuevo ataque. Gracias a él Chipre inquietó a los helvéticos. Quizás jamás lo vuelva a ver jugar, pero en el momento adecuado hizo un partido descomunal. Y aun así, a pesar de su actuación, Christofi seguirá viviendo en el anonimato.

viernes, 22 de marzo de 2013

Apareció, marcó y ganó Gylfi Thor

Volvió a hacerlo. Otra vez. Como en octubre de 2010, cuando su país estaba luchando por alcanzar el primer Europeo sub 21 de su historia. Entonces, en el momento decisivo, apareció Gylfi Thor para cambiar la dinámica de un partido que tenía mala pinta para Islandia. Hoy, en un encuentro de un guion similar, sacó dos goles de donde no había nada. Primero, un golpeo inhumano en una falta lejana para empatar cuando mejor estaba su rival, Eslovenia. Y después, un magnífico pero sutil detalle de calidad para romper la cintura de Bostjan Cesar y anotar el gol de la victoria.

Con estos dos goles de Sigurdsson, Islandia está un poco más cerca del Mundial. Todavía le queda un largo camino por delante y muchos partidos decisivos por jugar, pero ha conseguido superar con éxito una prueba decisiva. Hoy se podían hundir sus aspiraciones e incluso abrir grandes diferencias dentro del grupo E. Y ninguno de sus competidores tiene a un futbolista del potencial y la calidad diferencial del mediapunta islandés, ni siquiera Suiza en Shaqiri. Gylfi es otra cosa, un jugador con una enorme variedad de recursos: una falta como hoy, un disparo desde 30 metros que acaba en la red porque ningún rival le encima a tiempo, un quiebro inesperado para disparar con su pierna mala, una conducción con el balón atado al pie o simplemente una sorprendente aparición desde la segunda línea.

Hoy sólo dejó un par de pinceladas, pero con eso bastó. La Eslovenia de Srecko Katanec no pudo hacer nada más que resignarse y aplaudir a la nueva figura del fútbol islandés. Él es Gylfi Thor Sigurdsson.

lunes, 18 de marzo de 2013

Apuntes de la Eredivisie (I): AZ Alkmaar y el fantasma de la promoción

A partir de ahora voy a intentar que cada lunes o martes, a excepción de los parones de selecciones, haya una breve entrada en el blog sobre algún aspecto de la Eredivisie. La temporada 2012-13 en los Países Bajos está dejando demasiados detalles -arriba, abajo, en la zona media de la table e incluso en la Copa- como para no tratarla de manera periódica, más allá de que ya copase las últimas entradas. Asi que intentaré escribir unos párrafos sobre el fútbol de dicho país cada semana, pero no busco que monopolice el contenido del blog.

Altidore y Maher son los únicos que sostienen al AZ Alkmaar esta temporada. El estadounidense suma muchos goles para su equipo a pesar de las críticas que a menudo recibe. Con 18 tantos está firmando la mejor temporada de su carrera. En cambio, el segundo es capaz de aparecer una única vez en un partido y aun así cambiarlo radicalmente. También es el segundo máximo anotador de su club en liga con cinco goles. Se habla de que lo siguen varios grandes de Europa, pero debe mejorar para no salir perjudicado cuando dé el próximo paso. Todavía es demasiado irregular.

Ambos protagonizaron la jugada que metió al AZ Alkmaar por segunda vez en el partido de ayer. Pase largo del adolescente neerlandés para que el delantero estadounidense definiera. A partir de ese momento el AZ apretó como en los mejores minutos del primer tiempo, pero no empató. Algo habitual esta temporada. El número de puntos sumados es inferior al de encuentros disputados y sólo hay cuatro equipos con peor puntuación que los de Alkmaar en la Eredivisie. La promoción está a un solo punto y la preocupación es evidente. Ni siquiera compensa haberse metido en la final de Copa.

Lo que no queda claro es por qué el equipo sigue abajo. No juegan mal y marcan bastantes goles, pero no es suficiente. Poseen a futbolistas desequilibrantes que la mayoría de plantillas de la liga no tienen, pero nadie acompaña a Altidore. Tampoco es cuestión de haber vendido a Elm o Moisander. Esto puede explicar que no luchen por la liga o que se marquen menos goles a balón parado, pero no que el AZ esté rozando los puestos de promoción. Y cuando uno ha entrado en una dinámica tan negativa (2 de los últimos 21 puntos) es casi imposible salir de ella. El club lleva cerca de dos meses sin ganar en liga y esto explica, en gran parte, porque el equipo no puntuó ayer cuando lo merecía. Y claro, el Ajax está en un momento de forma totalmente opuesto. Pero de esto ya hablaré otro lunes.

martes, 12 de marzo de 2013

En estado de gracia

Graziano Pellè apareció en el gran escaparate futbolístico en 2005, cuando firmó un magnífico Mundial sub 20. Anotó cuatro goles y de este modo se erigió como uno de los grandes nombres a tener en cuenta en el futuro. No obstante, nunca llegó a rendir al nivel que insinuó en el torneo disputado en los Países Bajos. Desde el mágico verano de 2005 ha jugado en 7 clubes distintos. Y sin hacerlo demasiado bien hasta esta temporada.

En Italia su mejor año llegó en la Serie B 2006-07, con el Cesena. Sin embargo, no triunfó en su país -no se hizo con la titularidad en ningún equipo de Serie A- ni en la tierra donde se dio a conocer, pues en el AZ apenas marcó una quincena de goles en más de 70 partidos. Este verano, de rebote y en el último día del mercado de traspasos, Pellè se acabó instalando a menos de 60 kilómetros del lugar donde terminó el sueño de la selección italiana sub 20 en 2005: Rotterdam. 

Ahora Pellè hace disfrutar a los aficionados del Feÿenoord, uno de los equipos más populares y laureados del país. Tras hacer del jovencísimo John Guidetti un delantero internacional con Suecia la pasada temporada, también Pellè está superando todas las expectativas. Llegó cedido y ya lo han tenido que fichar visto su rendimiento. Ha marcado 20 goles en 22 partidos de liga y, además, se ha convertido en uno de los pilares del juego del equipo de De Kuip. Pero, sobre todo, el delantero italiano es la principal razón por la cual  los de Koeman están luchando por la liga.

Sus casi dos metros de altura se imponen ante la mayoría de defensas de la Eredivisie, que no pueden defenderle cuando sus compañeros le buscan en largo. El delantero italiano baja el balón al césped y habilita a los extremos o deja la pelota de cara para Immers o Trindade de Vilhena, generando de este modo una jugada de cierto peligro. Si a este recurso le sumamos el acierto que está mostrando de cara a portería, tanto con los pies como con la cabeza, tenemos a un delantero totalmente nuevo. Que sí, que en la Eredivisie las defensas son horribles. Pero ya ha triplicado sus mejores cifras en Holanda tras haber jugado prácticamente el mismo número de partidos.

jueves, 28 de febrero de 2013

La nueva posición de Wiljan Pluim

Mide metro noventa, es delgado y por sus larguísimas piernas puede parecer torpe. Y de hecho, no es precisamente un prodigio técnico. Hace poco más de un mes jugó de delantero centro ante el PSV Eindhoven y fue el mejor del partido porque aguantó el balón como nadie y lo soltó en el momento preciso para dárselo a los compañeros que llegaban desde atrás. Sin embargo, desde entonces está jugando en una posición muy diferente. Ya van varios partidos en los que Wiljan Pluim está siendo el mediocentro del PEC Zwolle. Y también uno de los mejores.

El buen rendimiento de Avdic, un delantero centro sueco más alto y fuerte que Pluim, quizás sea el motivo que ha provocado este cambio junto a la marcha de van der Berg en el mercado invernal. Ante la baja del mediocentro titular en la primera vuelta había que encontrar un recambio y Art Langeler se inventó una solución: retrasó a Pluim al centro del campo y, flanqueado por Drost, Slot o Klich, simplemente tenía que aguantar la posición.

En el último mes Pluim ha demostrado que sabe hacer bastantes cosas. Y que las sabe hacer bien. Parece torpe, pero sabe usar su cuerpo para proteger el balón ante la presión rival, virtud que le convierte en un futbolista especialmente útil a la hora de sacar el balón jugado desde atrás, es muy difícil robarle un balón. Además, lee correctamente el juego bajo presión y suele encontrar a un compañero libre a pesar de sus limitaciones. Por lo tanto, suma con el balón. Y sin él también, pues intercepta pases gracias a sus largas piernas y está atento para ayudar a sus compañeros. 

Pluim hace de ancla y los demás se mueven y juegan a su alrededor. Se ha adaptado muy bien a esta nueva posición y está ejerciendo de mediocentro a la perfección. Aun así, para mí siempre seguirá siendo ese delantero que desquició al PSV en el Philips Stadion. Un delantero que ahora ejerce de mediocentro. Por esta razón sus actuaciones no dejan de sorprenderme.

viernes, 15 de febrero de 2013

Vénissieux, la enésima historia de la Coupe

Vénissieux es una comuna francesa, lo que sería el equivalente del municipio, donde viven cerca de 60.000 personas. Forma parte del área metropolitana de Lyon, ciudad con la que está conectada a través de una línea de metro. A diferencia de la urbe vecina, mucho más grande, poblada y potente en el ámbito futbolístico, Vénissieux ha logrado clasificar a su equipo de fútbol para los octavos de final de la Coupe de France. Su rival será el Nancy, colista de la Ligue 1, que sólo ha ganado 3 partidos de liga esta temporada. Sin embargo, dos de sus victorias han llegado en el último mes y ahora están más cerca de la salvación, que a día de hoy marca el Evian Thonon Gaillard. Precisamente el filial de este equipo juega en la misma categoría que el Vénisseax: la quinta división francesa.

Sin embargo, Vénissieux es una ciudad de fútbol. El AS Minguettes puede presumir de haber sigo una etapa más en la formación de futbolistas como Luis Fernández o Jospeh-Désiré Job, internacional con Camerún en más de 50 ocasiones. Además, en este municipio nacieron futbolistas que acabaron nutriendo al fútbol base del Olympique Lyonnais como Ludovic Giuly, el internacional francés en casi todas las categorías inferiores Enzo Reale (ahora en el Lorient) o Maxime Gonalons, actual capitán del conjunto de Rémi Garde a sus 23 años.

De hecho, el padre de Enzo Reale, Alain, fue presidente del club durante 12 años, entre 1997 y 2009. En su etapa como máximo representante del AS Minguettes Vénissieux, este modesto equipo logró ascender por primera vez a la CFA2 (quinta división) e incluso subió a la CFA (cuarta categoría), donde se mantuvo durante dos temporadas. Desde entonces han jugado siempre en el quinto peldaño del fútbol francés. Reale abandonó la presidencia en 2009 y pasó a un segundo plano dentro del club, ya que ahora ejerce de tesorero, mientras que el argelino Ahmed Zouak fue quien ocupó su anterior puesto. La apuesta de la nueva directiva es conseguir mantener vivo al club a través de la cantera y de sus jóvenes futbolistas, ya que de allí han salido jugadores de cierto nivel.

Pero el motivo de redacción de este texto no es la política por la que opta el actual presidente del AS Minguettes Vénissieux, sino su actual aventura en la Coupe de France. Una vez terminado el sueño del AFL Mende, este equipo vecino del Olympique Lyonnais es el club de menor categoría que sigue vivo en la competición copera. Su camino ha sido relativamente fácil, ya que no han tenido que enfrentarse a ningún club que jugase en Primera o Segunda, pero allí están, haciendo historia y con una oportunidad magnífica para meterse en los cuartos de final. Difícilmente volverán a estar en una situación tan buena en los últimos años y el estado de forma del Nancy, a pesar de haber mejorado, da pie a los más optimistas.

La web oficial del club, a menudo reflejo de cómo reacciona el equipo cuando está haciendo historia, tampoco está especialmente cuidada ni aprovechando la oportunidad. La penúltima galería de fotos corresponde a una visita de Zidane a los equipos sub 15 y sub 17 en 2010, y apenas hay unas pocas noticias de los partidos de Coupe previos al encuentro del próximo miércoles 27. Apenas unas diez líneas a modo de previa de los dieciseisavos de final ante el Le-Poiré-sur-Vie y menor extensión todavía para la "crónica" de dicho partido.

Por lo tanto, es bastante complicado conocer su plantilla o calendario a través de su portal, pero si algo llama la atención es el apartado de encuestas. Según la web, el 67% de los aficionados creen que el equipo se clasificará para los octavos de final... pero con una muestra formada por tres votantes. Aun así, el próximo miércoles 27 serán unos cuantos más en el Matmut Stadium, habitualmente hogar de los partidos de rugby del equipo universitario de Lyon. En ese estadio caben 8.000 personas, más las que viven en Raon-l'Étape, el municipio de menor tamaño que sigue teniendo a un representante en la Coupe. Menos de 7.000 habitantes, según el censo de 2006, que soñarán con eliminar al Girondins Bordeaux. Pero ésta es otra historia. Una de las muchas que siempre deja la Coupe de France.

miércoles, 13 de febrero de 2013

La prueba que faltaba

Los conocíamos bastante bien, pero no quedaba claro su potencial real. Sabíamos de la calidad de sus futbolistas, pero apenas los habíamos visto exigidos en una gran noche, una de las de verdad, una de esas noches que a menudo marcan un antes y un después en un equipo. El actual Paris Saint-Germain es muy diferente de ese bloque al que se le escapó el título de la Ligue 1 hace unos cuantos meses. Y esta noche, en Mestalla, en una eliminatoria de Champions, ha confirmado las sospechas de los más optimistas.

Se podía intuir cuando cerró la fase de grupos recibiendo al Porto, en el partido que definiría el primer puesto del grupo A. Si bien es cierto que ambos equipos estaban clasificados, el PSG demostró su solidez y oficio ante un rival que siempre resulta incómodo. Entonces el 4-4-2 de Ancelotti en el equipo parisino no estaba tan trabajado ni consolidado, pero sirvió para ganar y conseguir la primera plaza del grupo. El rendimiento mostrado en ese partido por parte del conjunto francés fue bastante superior al del encuentro que enfrentó a ambos equipos un par de meses antes. Poco a poco las piezas de Ancelotti empezaban a encajar.

Luego pasaron las Navidades y, como siempre, llegó febrero y con él la Champions League. Era la hora de las eliminatorias y el PSG las recibía con un equipo que mezclaba jugadores veteranos y curtidos en multitud de batallas con noveles en partidos de máxima tensión europea. Sin embargo, su primera mitad en Mestalla va más allá de la experiencia de sus futbolistas o la calidad técnica de los mismos, ya que han demostrado que este equipo ya está hecho y definido a falta de pequeños matices. Sin Thiago Silva ni Motta, que apuntaba a titular, el PSG impuso su fútbol en Valencia, con un juego sobrio, serio y especialmente eficaz. Lo hizo con un 4-4-2 con Verratti protegido por Matuidi, omnipresente en el robo, y con Pastore y Lucas Moura como jugadores de banda, implicados ambos tanto en el trabajo defensivo como en el despliegue ofensivo. Además de contar con Lavezzi e Ibrahimovic, bastante acertados en ataque, a pesar del lunar que supone la expulsión del sueco en el tiempo de descuento.

Pero si algo resulta especialmente llamativo es el partido del brasileño Lucas Moura, de 20 años, jugador con el que van a tener pesadillas los futbolistas valencianistas durante varias noches. Además de ayudar al lateral de su banda, Jallet, sus carreras fueron imparables para el rival. Una vez arrancaba, por muy atrás que iniciara la galopada, nadie le podía atrapar. Y si salía algún jugador para cortarle el paso, él soltaba el balón o lo regateaba. Duró 52 minutos en el campo, pero ya ha superado mis expectativas y me ha dejado con ganas de volverlo a ver en un partido de esta exigencia o incluso mayor.

Lo mismo ocurre con este PSG, un equipo cada vez más maduro. A pesar del marcador de 1-2 -al final algo corto por las ocasiones del equipo francés, pese a la mejoría del Valencia en el segundo tiempo- han jugado a un gran nivel, especialmente en la primera parte. Y apetece seguirlos viendo en partidos que estimulen a sus mejores jugadores, porque si confirman el pase a los cuartos de final pueden ganar a cualquiera.

domingo, 10 de febrero de 2013

Una jornada en Breda

Hierbij ontvangt u de door u via Internet bestelde kaart(en) voor de wedstrijd NAC Breda - PEC Zwolle. Wij wensen u alvast een prettige wedstrijd!

Breda es una ciudad muy simpática. Sus casi 180.000 habitantes ya estaban celebrando el Carnaval el pasado sábado y, entre otras cosas, se veían personas disfrazadas entre las viejas casas del centro histórico, con guías turísticos vestidos con llamativos trajes que combinaban el naranja y el rojo representativos de la ciudad, junto a banderas de los mismos colores. Aun así, en la ciudad también se veía escondida alguna bufanda blanquiazul entre la ropa de abrigo. Además, como turistas, se agradecían detalles como la entrada gratuita a la Grote Kerk, sólo en estas fechas, que suponía un buen modo para hacer tiempo para el partido que se disputaba unas horas más tarde. Tamaño mediano, bastante población pero suficiente como para no resultar agobiante, negocios de distintos tipos, lugares para comer... en definitiva, un buen sitio para pasar un día entero. Poco importaba que fuera la segunda opción y que unas horas más tarde el Feijenoord visitara Tilburg, situada a pocos kilómetros de allí.

Sólo con su recepción Breda ya nos hizo olvidar lo que no íbamos a ver, ya no pensábamos en Clasie, Trindade de Vilhena o Graziano Pellè, sino en ver si el PEC Zwolle podía jugar a un nivel similar al de su visita a Eindhoven o observar con curiosidad al NAC para ver de qué armas disponía. Breda enamora con su primer contacto, prácticamente al bajar de la estación. Más allá de su enorme aparcamiento de bicicletas, algo común en los Países Bajos, hay imágenes que no dejan a uno indiferente. Avanzar entre las primeras calles de la ciudad y encontrarse con una "A" gigante como la de la foto inferior le saca la sonrisa a cualquiera. Lástima que no nos topáramos con una "B" cerca del NAC Stadion, llamado oficialmente Rat Verlegh en honor al mejor jugador de la historia del club, uno de los miembros del equipo campeón en 1921.

Una "A" a modo de Google Maps nos recibía nada más entrar en Breda
Tras el paseo de rigor por las calles más céntricas y con la mente puesta durante un rato en una ciudad cuyo nombre pudiese haber adoptado un club de un país bastante lejano, se iba acercando la hora del partido. Una de las incógnitas era ver si el estadio estaría repleto de aficionados disfrazados del mismo modo que los bredase que paseaban por la ciudad durante la tarde. Eso no ocurrió, ya que sustituyeron las bufandas de carnaval por las amarillas de su equipo. Algunos aficionados también hacían cola en la tienda oficial del club cerca de una hora antes del partido para comprar la suya junto a un par de extranjeros que querían otra de recuerdo, protección contra el frío y camuflaje en la grada. La cola, dentro de un local pequeño, organizado de manera muy poco eficiente y totalmente desbordado, con sólo una caja registradora, hizo que llegásemos a nuestras posiciones con el partido ya empezado, aunque sólo fueran dos minutos de retraso, y sin conocer las alineaciones. Aunque lo que más lamentamos fue perdernos el momento en que se lanzaron las tiras de papel amarillo, de un modo similar a la de los campos argentinos. También nos sorprendió la grada elevada y el bar que había debajo, con un par de pantallas que emitían el partido para que nadie se perdiera ningún detalle durante su transcurso si bajaba a comprar algo, principalmente patatas, un bocata o alguna cerveza.

Y el partido fue un buen reflejo de lo que es la Eredivisie, aunque la primera parte no fue especialmente vistosa por las limitaciones técnicas de ambos equipos. Además, Danny Verbeek, uno de los jugadores a los que más me apetecía ver, se lesionó en uno de los primeros lances del juego. Dominó el PEC Zwolle con un fútbol algo rígido, pero prudente. Toque corto y sin demasiado riesgo para ir metiendo al equipo local en su campo e ir ganando confianza. El NAC intentaba salir a la contra, pero le costaba horrores recuperar el balón y enlazar tres o cuatro pases seguidos. Los centrocampistas no se podían asociar y los delanteros estaban muy lejos, aunque en algunos tramos conseguían responder al dominio de los visitantes. El 4-3-3 local era contrarrestado por un Zwolle en el que Pluim, delantero centro ante el PSV, jugó en la posición más retrasada del centro del campo, ejerciendo de ancla para que Drost pudiese soltarse en ataque. Benson estuvo bastante bien partiendo desde la media punta y Avdic jugó una gran primera mitad, apoyando el juego de su equipo con notables toques de espaldas a la portería contraria. En los primeros 45 minutos siempre se impuso al defensor que le perseguía.

El Zwolle fue superior en la primera mitad, pero una jugada lo cambió todo poco antes del descanso. Pérdida ridícula del portero ante la presión de Lurling y el disparo del jugador del NAC es detenido por el brazo de Broerse, que fue expulsado. Penalti y 1-0. Empezaba el espectáculo de Lurling y el festejo del graderío del NAC Stadion.

Primera jugada de la segunda parte, saca el NAC Breda y a los 35 segundos marca el 2-0. Vaselina de calidad del veterano Lurling que parece que se va fuera pero que acaba golpeando en el larguero. El balón le cae a Nemanja Gudelj, que lo empuja para anotar el segundo. No hay que investigar demasiado para saber que Nemanja es uno de los favoritos de la afición. Su foto estaba enmarcada y puesta a la venta en la tienda oficial del club y los aplausos y cánticos de la afición parecen ser algo habitual para él. Si no hiciera tanto frío incluso apostaría a que su camiseta es una de las más populares. Además, él es canterano del club y su padre Nebojsa es el entrenador desde hace poco tiempo. Nebojsa Gudelj ya jugó en el NAC (1997-2005) después de haber pasado por el Logroñés y Leganés. Unos ocho años y casi 250 partidos con el club al que ahora entrena y donde está sacando buenos resultados.

Con el 2-0 y el rival con un hombre menos, la segunda parte fue muy cómoda para el NAC. El calor del público se manifestaba a través de cánticos y saltos que se concentraban en la grada donde atacaba el equipo en la segunda mitad, la de los seguidores más fieles, que vivieron el partido entero de pie. Tampoco faltó la ola, que dio un par de vueltas al estadio. Aunque quizás la anécdota del partido sucedió cuando un disparo se marchó muy alto y el balón cayó en las manos de la afición del sector mencionado anteriormente. La pelota no fue devuelta al campo de inmediato, sino que empezó a rodear el estadio, con los aficionados que se la pasaban entre ellos, algunos con una fuerza excesiva. El balón recorrió uno de los fondos y la tribuna lateral antes de que se perdiera entre las cabezas de aficionados locales. El partido había pasado a ser algo secundario, pero la diversión y satisfacción de los aficionados con su equipo era total. Entre todo esto llegó el tercer gol, tras una muy buena definición de Hadouir. Entonces todos esperaban la irrupción del chico de la bandera amarilla que recordaba el resultado para el orgullo de los aficionados locales. Partido cerrado, el NAC ya sólo esperaba la posibilidad de salir al contraataque para marcar el cuarto pero sin arriesgar más de la cuenta.

Una bandera anunciando el resultado recorría el estadio tras cada gol local
Entró Furdjel Narsingh, hermano del jugador del PSV Luciano, que tuvo unos minutos y no vimos a Valpoort, jugador cedido por el Heerenveen, pero ya poco podían cambiar. La imagen del Zwolle tras la expulsión fue algo pobre, incapaz de crear peligro con uno menos, aunque con su primera mitad quedó claro que hay equipo para no descender porque tienen bastantes virtudes: buenas zurdas las de Drost y Achenteh -notable la del segundo a balón parado-, el juego de espaldas de Avdic, las apariciones de Benson desde la segunda línea o el más que correcto partido de Pluim en una posición poco habitual para él. El NAC, por su parte, supo jugar con el partido de cara y vimos lo mejor de Buijs y Gudelj, amos del centro del campo con espacio y tiempo para pensar y ejecutar. Aunque el mejor, de largo, fue Lurling, que empezó jugando de delantero pero que pasó a la banda derecha tras la lesión de Verbeek. Estuvo muy activo por su banda y tiró del equipo en todo momento. Era el jugador más creativo del NAC, el más capacitado para improvisar y hacer algo distinto, como sucedió en la jugada del segundo gol. A sus 35 años sigue pesando muchísimo en uno de los equipos modestos de la Eredivisie.

Con el pitido final, tras no añadirse ni un minuto de descuento, llegó la vuelta de agradecimiento de los jugadores y el regreso a casa. Bicicletas que iban a toda velocidad apartando a los peatones si hacía falta y coches que lucían con orgullo la banderas de su equipo. Satisfacción general del aficionado con el juego de su equipo y con la buena racha que atravisesa el NAC, que se ha visto frenada este fin de semana. Aun así, el estadio se llenará el próximo sábado. Llega el Heracles y habrá descuentos (entradas a 5€) y ofertas para celebrar el Carnaval, con packs para los socios que incluyen hasta cuatro entradas y tres litros de cerveza por 20 euros más. La cerveza, como no podía ser de otra manera, irá en vasos conmemorativos del centenario del club (1912-2012).

Haber dormido muy poco la noche anterior, llegar a casa pasadas las doce de la noche por el retraso del tren e incluso haberse perdido los instantes previos al partido poco importaba una vez metido en la cama. La sensación de haber acudido a ver un partido de liga holandesa lo superaba todo y hacía olvidar que incluso ese partido no había sido la elección inicial. Pura Eredivisie en un duelo que no deja de ser una disputa entre dos equipos muy modestos para alejarse del descenso. A pesar de que cinco o seis equipos peleen por el título, quedan otros doce que también existen y a los que, desde la distancia, sólo podemos ver a través de resúmenes de relativa longitud. NAC Breda y PEC Zwolle son dos de ellos y aunque tengan sus evidentes limitaciones, proponen soluciones. Y como rezaba la carta que acompañaba a las entradas, la que ha abierto este texo, y la propia frase inscrita en el tíquet de entrada, vimos un prettige wedstrijd. Un muy buen partido de fútbol en una ciudad agradable y recomendable.

viernes, 1 de febrero de 2013

La base del futuro peruano

Perú jamás ha estado en un Mundial sub 20. De hecho, la última vez que la selección quedó entre los cuatro primeros clasificados del Sudamericano de la categoría fue en 1975. No obstante, mañana (domingo) tienen la oportunidad de igualar este éxito tan lejano y además clasificarse por primera ver para la competición más importante del nivel sub 20. Para ello tienen que ganar a la selección chilena de Rabello, Seba Martínez, Nico Castillo y Lichnovsky. Y aunque no lo logren su torneo habrá sido magnífico.

La selección peruana sub 20 ha conseguido formar una generación de futbolistas muy prometedora. Sobre todo en el apartado ofensivo, donde tienen uno de los equipos con mayor cantidad de talento del torneo, con múltiples variantes. Además, varios de sus futbolistas ya han dado el salto al extranjero, por lo que poco a poco se va gestando un equipo de cierto potencial a medio y largo plazo. Una prueba más de que el fútbol de Perú está evolucionando, más allá del éxito que supuso el tercer puesto logrado en la pasada Copa América.

Sin embargo, a la selección peruana se le está haciendo muy largo el torneo y sus jugadores han llegado agostados al tramo decisivo. Edison Flores (Villarreal B) y Benavente (categorías inferiores del Real Madrid) son menos desequilibrantes y participan en menor medida en el juego de su equipo. El primero, tiene una muy buena zurda y sabe asociarse bien con sus compañeros mientras que el segundo participa muchísimo en el juego, es más desequilibrante en el regate y quizás es el futbolista más creativo e imaginativo de la plantilla. Ellos han perdido la frescura que mostraron en la fase inicial del torneo, pero por la gran cantidad de jugadores que Perú tiene para dicha zona del campo siempre hay alguno que destaca y lo intenta compensar si ellos no están acertados.

Por ejemplo, Polo, Reyna y Deza son atacantes rápidos y hábiles que aportan profundidad. Además, cada futbolista tiene sus características particulares y aporta distintas virtudes. Deza es un segundo punta explosivo pero demasiado individualista, ya que a menudo abusa conduciendo el balón durante demasiado tiempo. En cambio, Andy Polo también aporta velocidad, pero partiendo desde la banda derecha. En este torneo ha jugado más cerca de la línea de banda que de la frontal del área. Otro tipo de velocidad aporta Reyna, que ha jugado la mayoría de partidos como hombre más adelantado y que hace estragos en las defensas con sus desmarques de ruptura. Además, sabe usar muy bien su cuerpo para proteger el balón y forzar faltas. Un perfil distinto al de Bulos, que es más corpulento y menos móvil, un rematador de área de los de siempre.

Todos estos jugadores han tenido su momento, aunque Andy Polo y Bulos han sido los que peor rendimiento han dado. Por detrás tienen a Guarderas y Cartagena como fieles escuderos, e incluso a Hinostroza, un centrocampista de buen trato de balón, bastante hábil, y que también ha jugado varios partidos en la banda derecha. Su entrada en esa posición garantiza mayor posesión de balón y más pausa para un equipo que suele ser bastante vertical y directo en su juego. También hay que destacar el magnífico torneo de Guarderas, el pilar en el centro del campo. Se coloca bien, cualidad que le permite robar y ganar bastantes balones, y tiene una zurda exquisita. Sus pases en profundidad suelen ser precisos y si él aparece a menudo Perú suele estar bien.

No obstante, no todo son virtudes y la defensa flojea. Perú ha concedido demasiado atrás y ahí ha perdido bastantes puntos, ya que es un equipo menos fiable que Uruguay o Paraguay. Gómez es un lateral de buenas condiciones que se incorpora bien al ataque y Tapia es un portento físico de gran zancada, pero dos años menor que los demás. El portero Campos también está haciendo un buen torneo, pero deja algunas dudas en los balones aéreos. Colectivamente los atacantes no siempre ayudan y eso complica las tareas de contención. Cuando Perú se ha ido echando hacia atrás con el marcador a favor y ha dejado de presionar arriba ha sufrido más de la cuenta.

Así llega Perú al partido decisivo de mañana, en el que se juega clasificación ante Chile en un duelo directo en el que sólo le vale ganar (domingo, 21:30h). Pero el éxito de esta selección no debería depender de este encuentro. Perú acabó la primera fase como líder de un grupo difícil, por delante de Brasil y Uruguay, y tiene una plantilla con más talento que Paraguay, que quizás acabe alzando el título. El Sudamericano sub 20 tiene que sentar las bases para una generación ilusionante a medio y largo plazo. Y si el premio es su presencia en el Mundial sub 20, mejor, porque le daría aún más vuelo a este equipo. En cualquier caso, del trabajo bien hecho acabarán obteniendo réditos. Y más si los jugadores son buenos, como en este caso.

martes, 29 de enero de 2013

Sin estrellas compiten mejor

Malí no es un equipo vistoso. Tampoco resulta especialmente atractivo para el espectador neutral, que difícilmente sentirá simpatía por su fútbol como quizás sí ocurra con otras selecciones de menor cartel como Etiopía o Cabo Verde. Además, la magnífica generación que lideraban Mahamadou Diarra, Fréderic Kanouté y Seydou Keita se ha apagado. El primero se ha perdido la CAN por lesión, el segundo se despidió de la selección hace tres años y, como Keita, ha emigrado al emergente fútbol chino. El que podía ser el líder de la siguiente generación, Mohamed Sissoko, se ha quedado en menos de lo que insinuaba a pesar de jugar actualmente en el poderoso PSG. 

Pero, con un equipo peor y aparentemente discreto, Malí sigue compitiendo. De hecho, quizás compite mejor ahora que hace cinco años, cuando se presentó en la Copa de África con sus tres estrellas en su mejor momento conjunto. Entonces le tocó un grupo complicadísimo, con Costa de Marfil y Nigeria, y se quedó fuera en la primera fase. Dos años más tarde la decepción se repitió cuando Malí tampoco fue capaz de superar la fase de grupos a pesar de la espectacular remontada en el partido inaugural.

Tras estos dos fracasos, Malí fue objeto de un cambio radical. Al no tener a jugadores de tanta calidad se aprovechó la fuerza del bloque, que fue la principal característica del equipo de Giresse en la pasada CAN. Con una hoja de ruta totalmente opuesta a la de otras selecciones como Marruecos o Senegal, de enorme potencial en lo individual y pésima coordinación en lo colectivo, organizar un equipo compacto fue la prioridad. Malí pasó a ser un equipo incómodo que cedía el balón pero al que era muy difícil inquietar. Perdieron recursos en ataque, pero las jugadas a balón parado y el acierto de Diabaté en el remate permitieron compensarlo con un mínimo de goles. De esta manera Malí pasó de caer en la fase de grupos a subir al tercer escalón del podio africano.

El seleccionador ya no es Giresse, pero Carteron ha decidido aprovechar la herencia recibida. Ayer ante la República Democrática del Congo vimos una exhibición defensiva del equipo malí, que tras la locura inicial hizo que su rival se sintiese impotente. Líneas bien juntas, equipo compacto, muchos hombres tapando líneas de pase por el carril central y velocidad para salir al contraataque. Como en el partido anterior contra Níger, la RD Congo fue incapaz de crear peligro ante un rival bien replegado. Aquí un ejemplo: a partir del minuto 20 el portero Samassa sólo tuvo que intervenir una vez, para detener un disparo. Y éste tuvo que ser desde fuera del área. De hecho, Malí hasta tuvo ocasiones en los últimos minutos como para acabar ganando.

Ésta será su carta de presentación para el partido de cuartos de final que disputarán contra Sudáfrica. Por lo tanto, un rival de un nivel similar que les permite soñar con las semifinales y repetir la actuación del año pasado, algo que hace poco parecía una utopía. No serán un equipo divertido, pero pocos equipos dominan tan bien el arte de hacer que pasen tan pocas cosas en su contra durante noventa minutos de partido sin necesidad de monopolizar la posesión de balón. Son tan distintos a los demás que hasta ahora sólo han encajado goles de penalti. Saben sufrir y compiten de maravilla.

domingo, 20 de enero de 2013

El partido de sus vidas

La última jornada de la Eredivisie ha sido atípica, con un Twente que se ha dejado puntos en casa ante el RKC Waalwijk, un AZ que se ha olvidado de su mal momento goleando a un Vitesse sin Bony o con un Amsterdam ArenA cubierto que ha cedido parcialmente por la acumulación de nieve. Aunque lo más sorprendente llegó el viernes, en el partido inaugural. Entonces apareció en escena el PEC Zwolle, un equipo de la parte baja que sólo había ganado tres partidos, para sorprender y vencer al PSV en Eindhoven.

La victoria del Zwolle no fue un mero accidente, un pequeño despiste de un PSV que domina y no transforma sus ocasiones. No fue así. Realmente merecieron la victoria, con una puesta en escena magistral y con unos jugadores modestos que se creyeron capaces de ganar a cualquiera. Parecieron un equipo grande y además transformaron las pocas ocasiones que tuvieron. El Zwolle fue capaz de salir al contraataque en varias ocasiones a lo largo del primer tiempo y siempre con muchos jugadores llegando al área. En una de estos ataques van den Berg se disfrazó de genio engañando a Zanka Jorgensen con sólo un pequeño amago con el cuerpo y tras varios rebotes el balón lo empujó Benson. Merecido tanto entonces que transmitía la sensación de que al equipo de Langeler le salía todo bien. Con recursos mucho más limitados fueron capaces de hacer mucho más.

Sin embargo, el Zwolle tuvo un tramo en el que tuvo que sufrir. Y supo sobrevivir a él. Acabó agotado físicamente el primer tiempo y el PSV lo encerró en su campo hasta conseguir empatar el partido. Esta dinámica fue la que se impuso también en los primeros instantes de la segunda mitad hasta que, en la única que tuvieron, Benson aprovechó un desajuste defensivo para volver a adelantar a su equipo. Entonces el Zwolle se transformó y pasó de ser el decimotercero clasificado a disfrazarse de equipo digno de competición europea.

Por ambas bandas Mokhtar y Gravenbeek crearon peligro de manera constante. El rival se lanzó al ataque y dejó vacía la posición que ocupaban sus laterales, por lo que tenían espacio y tiempo para correr. Entre ellos se encontraba Benson, el autor de los dos tantos, que estuvo mejor en los primeros sesenta minutos de partido. Supo aprovechar que Pluim retenía la atención de ambos centrales para entrar desde la segunda línea a posiciones de remate. De hecho así fueron sus dos goles, parecía indetectable para los defensores rivales.

Pero el mejor fue el delantero centro, el ya mencionado Pluim. Con el partido ajustado distraía a los centrales y generaba espacio para sus compañeros. Pero con el 1-2 creció y decidió que era su momento, simplemente. Olió la sangre de un tocado PSV y empezó a participar en el juego. Apoyos más cortos y otros más largos, juego de espaldas, aperturas a las bandas, sensación de amenaza en el área... parecía mucho más que no un delantero que sólo había marcado un gol en la Eredivisie en los dos últimos años. En un córner llegó su gol, con un magnífico cabezazo. El primero de la temporada.

Pluim cerró el partido en el minuto 63 y luego vino el esperpéntico final de un PSV incapaz de batir a un Diederik Boer tocado por una varita mágica, porque paró todo lo que llegó, tanto de manera voluntaria como involuntaria y fortuita. Fue una bonita recompensa para un portero que lleva 12 años en la institución y que además tiene un dedo menos en una de sus manos desde que es un niño.

El próximo sábado el PEC Zwolle jugará su siguiente partido y posiblemente vestirá su ropaje habitual, el de un equipo modesto que tampoco encaja muchos goles pero que hasta este viernes había sido incapaz de anotar tres en un mismo partido. Difícilmente jugará a un nivel similar el  próximo sábado, ni en cualquier otro partido de esta temporada, pero jamás olvidarán la noche del pasado viernes. Ese día simplemente se creyeron potenciales campeones de Europa.

viernes, 18 de enero de 2013

Un torneo para conocerlos

No gusta a todo el mundo. Los que más se quejan son los clubes, que a veces se lo piensan dos veces antes de fichar a un futbolista africano. Incluso a algunos futbolistas tampoco les gusta esta competición, pero esto es menos habitual. A los que nos gusta el fútbol nos complica un poco más cuadrar nuestro calendario, porque la carga de partidos a ver aumenta por encima de las posibilidades que permiten las 24 horas del día. No obstante, la Copa de África siempre apetece. Y empieza este sábado (Sudáfrica-Cabo Verde, 17h).

La CAN es una competición especial. Es una oportunidad para descubrir jugadores y para prestar atención a partidos que jamás veríamos. Sobre todo es una manera de acceder a futbolistas, equipos y estadios con los que difícilmente podríamos entrar en contacto desde la distancia. Esto también implica un escaparate para los futbolistas. No será tan grande como un Mundial, incluso de categorías sub 17 y sub 20, pero es una oportunidad importantísima para muchísimos países. Y participar en una Copa de África es bastante más fácil para un país como Cabo Verde, Sudán o Libia. Sin ir más lejos, la selección de Sudán participó en la pasada edición con una convocatoria formada íntegramente por futbolistas de la liga local y alcanzó los cuartos de final tras superar a la Angola de Manucho en la fase de grupos. Eso es Copa de África en estado puro. De hecho, a estos chicos posiblemente los vio más gente en dos semanas de CAN que en toda su carrera profesional hasta entonces. O al menos los vieron jugar en mayor cantidad de lugares.

Esta edición significará un pequeño cambio, ya que será la primera vez que el máximo torneo de naciones africano se disputará en dos años (2012 y 2013) de manera consecutiva. De este modo se evitará que coincidan Mundial y Copa de África en un mismo año natural en el futuro. Pero esta modificación no provocará que esta competición sea menos atractiva, sino todo lo contrario. Por ejemplo, selecciones como Marruecos, Ghana o Costa de Marfil buscarán reivindicarse y olvidar la decepción de la última edición. Pero lo más estimulante siempre llegará con esas selecciones desconocidas, como la debutante Cabo Verde, la modesta Níger o la ya olvidada Etiopía, que regresa a una Copa de África 31 años después. No las veremos en las rondas finales del torneo, donde echaremos de menos a Senegal, Camerún y Egipto, pero la CAN también es suya.

martes, 8 de enero de 2013

Impossible n'est pas mendois

Uno de los momentos más bonitos del año se produce cuando los equipos de Ligue 1 se suman a las eliminatorias de la Coupe de France. Esta ronda, que como en el caso de la FA Cup se juega a principios del mes de enero, contiene multitud de historias. Éstas son historias de clubes y jugadores anónimos, pero también de otros que no lo son tanto, que simplemente salen en la prensa del lunes con un resultado y un número al lado en su clasificación en liga. Por lo general son nombres que no saltan a la vista cuando uno va pasando las páginas, pero que tienen su momentito de gloria. En otras ocasiones, éstas son historias de clubes gigantes que han sido derrotados por rivales teóricamente muy inferiores. Por esta razón se ven humillados, porque además sus caras de tristeza y decepción ocupan las portadas en que desearían ver la foto de su capitán alzando la Copa. 

Aun así, a veces encontramos otro tipo de historias, relatos que tratan de clubes inexistentes a los ojos de los demás, de equipos minísculos que existen más allá del anonimato. Éstos son clubes cuya clasificación hay que buscarla en las profundidades del fútbol francés y no en la esquina inferior de los periódicos, teniendo que confiar completamente en la página web de tales instituciones. Nadie ha creído necesario ni siquiera escribir una página en la Wikipedia francesa en su honor, y eso que éste representa a una ciudad de 12.000 habitantes y hasta adopta el nombre de la región de Francia donde se encuentra. Aunque eso no evite que su campo de fútbol se halle en una esquina olvidada de la propia ciudad.

Aquí entra en acción el Avenir Foot Lozère Mende, un equipo del sur de Francia. El municipio de Mende, situado en el departamento de Lòzere dentro de la región del Languedoc-Roussillon, está perdido dentro del a nada, aunque siempre ha sido un lugar de paso donde se han producido conflictos. Una distancia de unos 130 kilómetros la separa de los dos núcleros urbanos más grandes a su alrededor, que son Nîmes y Montpellier, prácticamente lo único que hay cerca. Un poco más lejos, a 140 kilómetros, encontramos la ciudad del último rival copero del AFL Mende. La historia del Arles-Avignon es la de un club que firmó una pésima temporada 2010-11 en la Ligue 1 -era un recién ascendido, pero sólo sumó 20 puntos- y que poco antes se había mudado de Arles a Avignon, lo que supuso un traslado de 33 kilómetros hacia el norte para sus aficionados.

Los clubes de estas ciudades relativamente cercanas se cruzaron en la última ronda de la Coupe. No obstante el AFL Mende merece un poco más de atención. Este equipo de la séptima división del fútbol galo eliminó al Limoges FC de la quinta categoría del fútbol francés hace un mes. Ésta es la mayor hazaña de un club que cumplirá nueve años de vida el próximo mes de junio. Para ser más exactos, el 22 de junio de 2004. Ese día se fusionaron el Eveil-Mendois Football y el AS Valdonnez. De ahí salió el AFL Mende, que se estableció en la ciudad que lleva el mismo nombre, donde ya jugaba el primero de los dos equipos mencionados. También intuimos que a raíz de esta fusión nació un equipo paralelo para mantener la herencia del AS Valdonnez, porque en 2004 también nació el Valdonnez FC. Actualmente este club está jugando en la misma liga que el AFL Mende y el código postal identificado en su web nos enlaza a un pueblo fronterizo. No obstante, sus orígenes no quedan demasiado claros.

Pero volvamos al AFL Mende. Actualmente dominan su liga, en la 7ª división francesa, también llamada "liga de honor regional de Languedoc-Roussillon". Han sumado 40 puntos tras 10 partidos en el grupo A. Porque, efectivamente, en esta categoría, además de haber dos grupos, las victorias suman cuatro puntos, los empates, dos y las derrotas, uno. Al fin y al cabo no es necesario correr el riesgo de dejar a algún equipo con 0 puntos en la categoría amateur, y la diferencia entre victoria y empate o entre empate y derrota sigue siendo la misma. Con un colchón de cuatro puntos en liga y camino de mejorar el tercer puesto de la temporada pasada el AFL Mende recibía la visita del Arles-Avignon, que no deja de ser el origen de este texto.

Un mosaico amarillo recibe al Arles-Avignon en Mende

La afición, como en el partido anterior de Coupe, ya iba preparada con el mosaico amarillo que muestran los seguidores del AFL Mende con el programa del encuentro en mano. Difícilmente soñaron con un partido mejor del que vieron, ya que empezaron ganando en el minuto 19 y lo cerraron en el 90 con un segundo gol. Ambos tantos los marcó Fadil Gourmat, capitán del modesto conjunto de Mende, y también ayudaron los postes, tres en total, para mantener la portería a cero. Así derrotó el AFL Mende a un equipo de Ligue 2 que combinó en su alineación a futbolistas titulares con otros menos habituales.

De este modo la ciudad de Mende ha vuelto a meter a un equipo de su localidad entre los 32 mejores equipos en la Coupe de France 14 años después. Aunque su escudo no haga referencia a su historia anterior, la web del club destaca con orgullo que Juju Titiguei y Stéphane Saurat, dos miembros de la actual plantilla, ya fueron protagonistas en 1999. El segundo, de hecho, es el actual entrenador del AFL Mende. Entonces ya se le describía en la ficha como "apasionado", por lo que su actual rol en el club posiblemente no debe sorprender a nadie.

Con la victoria del pasado fin de semana el AFL Mende ya ha igualado el mejor registro de la ciudad y, por mucho que se sienta heredero del Eveil-Mendois Football, podemos asegurar que está viviendo el mejor momento en sus 8 años y medio de existencia. En 1999, el entonces equipo de Saurat y Titiguei cayó en casa por un contundente 1-4 ante el AS Angoulême, un equipo que entonces jugaba en 3ª y que actualmente está en la 6ª división. De hecho, en la plantilla del AS Angoulême jugaba Marc-Antoine Fortuné, pero eso ya es otra historia.

El Avenir Foot Lozère Mende se ha ganado una oportunidad para superar cualquier récord y colarse en los dieciseisavos de final. El Le Havre espera en la próxima ronda, que se disputará en un par de semanas. Para los 12.000 habitantes de Mende el Le Havre no deja de ser otro equipo de Ligue 2 al que intentarán batir en casa para soñar con una nueva eliminatoria y quizás con un equipo de mayor entidad. Y atención con la eliminatoria del CS Meaux Academy, uno de los equipos en los que jugó Joël Cantona, hermano de Éric, y que forma parte de una categoría amateur ligeramente superior, la 6ª división. Se enfrentará al Saint-Étienne para igualar sus mejores registros en la Coupe, obtenidos en 1976 y 1986. Pero dejemos esa historia para más adelante, que en esta ocasión el AFL Mende merece ser protagonista.