Pocos recursos, grandes resultados

El Arsenal no gana nada desde esa FA Cup de la temporada 2004/05. Eso es una obviedad. Ese 2005, el Arsenal se vengó del Manchester United, que lo había eliminado de la Carling Cup esa misma temporada y en las semifinales de la FA Cup del año anterior -competición que ganaría posteriormente el United ante un Milwall en el que jugaba Tim Cahill-, ganándole la final de la FA Cup en los penaltis.
Un año más tarde, en la temporada 2005-06, el Arsenal se metió en la final de la Champions League. La primera en toda su historia. Pero no pudieron ganar al FC Barcelona, que ese día levantó su segunda Champions.
Desde entonces, el Arsenal ha llegado a dos finales de la Carling Cup, ambas perdidas por dos goles a uno, igual que la final de la Champions League. Una perdida contra el Chelsea de Jose Mourinho, la otra contra el Birmingham de Alex McLeish.

Pero, tras el partido de ayer, parece que Wenger no ha hecho nada bueno en los 14 años y medio que lleva en el club. En este largo periodo que Wenger lleva en el Arsenal, el alsaciano ha ganado tres ligas (dos de ellas acompañadas de un título de la FA Cup, las de 1998 y 2002, y la 2003-04 sin perder un sólo partido), ha sido segundo en cinco ocasiones, tercero tres veces y cuarto en otras tres ocasiones. Eso significa ser primero o segundo en más de la mitad de todas sus temporadas en el Arsenal. Mejores registros y más regulares que los de George Graham que, entre 1986 y 1995, consiguió dos ligas, cuatro cuartos puestos, dos sextos, uno décimo y uno duodécimo. También ganó una FA Cup, un par de copas de la liga y una UEFA. No está nada mal, pero creo que ayuda a valorar más lo que ha hecho Wenger, un entrenador desconocido en ese momento en Inglaterra y que le dio un nuevo aire al Arsenal.

Wenger ha hecho que este Arsenal (boring, boring Arsenal), sea visto como un equipo que propone buen juego. Que el Arsenal sea un equipo consolidado en el famoso Top Four. Porque el año pasado, con la irrupción del Manchester City (que fichó del Arsenal a Touré y Adebayor), parecía que sería el Arsenal el equipo que se caería de ese Top Four. Pero no. El que cayó fue el Liverpool - por otros motivos- pero el Arsenal aguantó y tuvo sus oportunidades de competir por la liga hasta el tramo final de la temporada pasada.

Desde la construcción de su nuevo estadio, el equipo gunner tiene que hacer milagros para mantener un equipo competitivo. Quizás esos 19 millones que han sido invertidos esta temporada en Koscielny y Squillaci podrían haberse invertido en un central que mejorara a ambos. Quizás habría que analizar con más atención y profundidad las razones por las que Van Persie, Cesc Fàbregas y Theo Walcott se lesionan tan frecuentemente. Pero, pese a ello, el Arsenal es un equipo competitivo. El único que está todavía tiene opciones de ganarle la Premier League al Manchester United. Y eso que su presupuesto no es comparable con el de los grandes de Inglaterra. Se le compara con el Barcelona, con el United, con el City o con el Chelsea. Clubes con mayor poder adqusitivo, que en los últimos años han hecho, como mínimo, un fichaje a un precio que está al alcance de muy pocos clubes (véase Villa, Ibrahimovic, Berbatov, Tévez, Silva o Torres). Pero el fichaje más caro del Arsenal en los últimos 5 años ha sido el de Arshavin (16 millones y medio), seguido por los de Nasri (16 millones) y Koscielny (12 millones y medio). Estos fichajes, además de los de Vermaelen, Eduardo da Silva o Rosicky, los únicos de ocho cifras que se han hecho en las últimas 5 temporadas, pero que han sido compensados con las ventas de pilares como Hleb, Henry, Adebayor, Ashley Cole o Kolo Touré.

Pero el equipo todavía es joven. No quiero utilizar este argumento como excusa -porque ya no lo es, porque que sus jugadores están mejorando y ya son bastante maduros - sino como una muestra de esperanza, como un reflejo del potencial que tiene este equipo. El once inicial que perdió ayer la final de la Carling Cup tiene 24,8 años de media. Y eso que no estaban ni Walcott ni Cesc, que todavía bajarían más esa media de edad. Pero estos chicos también tienen un hándicap. De esos mismos 11 jugadores que fueron titulares ayer, sólo Rosicky (tres ligas en República Checa y una con el Dortmund), Arshavin (una UEFA, una liga, una Copa y dos Supercopas con el Zenit), Robin Van Persie (una UEFA con el Feyenoord; una FA Cup y una Community Shield con el Arsenal), Bacary Sagna (una Copa de Francia con el Auxerre) y Gael Clichy (una FA Cup, una Premier y una Community Shield) han ganado algún título. Cinco de once, una cifra significativa de jugadores que han ganado algo, pero son pocos. Dato extensible a toda la plantilla del Arsenal, a la que se sumarían Vermaelen, Squillaci, Cesc Fàbregas Chamakh, Fabianski y quizás alguno más.

Esto último puede llevar al Arsenal a chocar con una barrera psicológica. Una de esas barreras difíciles de romper, aunque no imposibles. Como la maldición de cuartos de la selección española con los cuartos de final en las grandes competiciones o la todavía actual mala racha del Madrid con los octavos de final en la Champions League. El Arsenal necesita ganar un título, necesita un punto de inflexión positivo pronto. El partido de este domingo era una buena oportunidad para ello. No pudo ser así. Pero habrá más oportunidades. Queda la FA Cup, queda la Premier League y tienen una ventaja de 2-1 que tendrán que defender en el Camp Nou en Champions. Wenger tendrá que hacer ver a este grupo de magníficos futbolistas que son capaces de ganar títulos. Tarde o temprano lo van a conseguir. Y el Arsenal está más cerca de lo que parece de ganar un título, lo van a conseguir pronto, seguro.

La Europa League, una competición infravalorada

Este jueves se disputaron los últimos encuentros de vuelta de los dieciseisavos de la UEFA Europa League, una competición mucho menos mediática que la Champions League, pero eso no significa que no haya un buen nivel. Es una competición, evidentemente, con menos nivel que la Champions League, pero, al mismo tiempo, mucho más igualada. Este año sólo hay un equipo por encima de los demás - el Manchester City tanto por su potencial económico como por su plantilla-, y la mayoría de equipos que siguen vivos en la competición están un peldaño - no demasiado grande - por debajo de este equipo que podría estar perfectamente compitiendo para estar en los cuartos de final de la Champions League.

Más allá de que hayamos podido ver muy buenos partidos y eliminatorias competidas hasta el final (Villarreal-Napoli, Sporting-Rangers o PSG-BATE Borisov son ejemplos de eliminatorias equilibradas hasta el final), los octavos de final tienen un montón de alicientes. Son eliminatorias parejas, entre equipos de nivel parecido y de pronóstico incierto. En resumen, partidazos.

Si nos metemos a analizar los equipos que estarán en octavos (eliminatorias Benfica-PSG, Dynamo de Kiev-Manchester City, Twente-Zenit, CSKA Moscú-Porto, PSV Eindhoven-Rangers, Bayer Leverkusen-Villarreal, Ajax-Spartak de Moscú y Sporting de Braga-Liverpool), podemos observar el nivel igualado de la mayoría de eliminatorias y, en general, de los equipos que la disputan. Podríamos clasificar estos equipos en tres bloques.

El favorito es el Manchester City. El mejor equipo de la Europa League, dispone de la mayor plantilla y debería optar al título. Casi sin opciones de ganar la Premier League, la Europa League (junto a la FA Cup, en la que jugarán contra el Aston Villa este miércoles) tiene que ser su prioridad. Pocos equipos pueden competir contra este equipazo que tiene en Dzeko, Silva, Tévez, Balotelli y Touré Yayá sus grandes bazas para desequilibrar partidos complicados. Y también eliminatorias.

El segundo peldaño está formado por los Porto, Villarreal, Bayer Leverkusen, Liverpool, Zenit y PSG. Éstos me parecen los candidatos a la Europa League (por detrás del City, claro), que tienen muchísimo nivel y que pueden crear muchos problemas a todos los equipos que siguen vivos en la Europa League. Todos ellos tienen a jugadores desequilibrantes, determinantes. Aunque no tantos como el Manchester City.

El Benfica, CSKA de Moscú, Dynamo de Kiev, Twente, PSV, Ajax, Braga, Rangers y Spartak de Moscú me parecen equipos de nivel, pero no para ganar la competición. Pueden estar en cuartos de final - alguno de ellos va a estar ahí -, pero no creo que entren en las semifinales (falta ver cómo quedan los cruces de cuartos de final). Son buenos bloques, que pueden resultar difíciles de ganar, pero a los que no veo al mismo nivel que los equipos del segundo peldaño. El CSKA y el PSV podrían estar en el segundo peldaño, pero no creo que puedan ganar el título. Aunque seguro que tienen algo que decir ante Porto y Rangers.

En los octavos de final de la pasada Europa League ya vimos algunas eliminatorias espectaculares. Ese Werder Bremen-Valencia, el gol de Kardec en el descuento que eliminó al OM en el Vélodrome, una espectacular eliminatoria entre Hamburgo y Anderlecht, una prórroga entre Wolfsburg y Rubin Kazán o la increíble remontada del Fulham a la Juventus, de la que recuerdo un golazo de Dempsey. Esos octavos de final fueron, a nivel global, mucho más intensos, emocionantes e incluso mejores que los de la Champions League de esa edición. No sé si este año vamos a vivir lo mismo, pero tengo unas expectativas bastante altas respecto a estos octavos de final, que tienen una pinta formidable. Tendremos que esperar al 10 y 17 de marzo para verlo.

Octavos de la Champions League (previa 2ª semana)

Tras disfrutar de los primeros cuatro partidos delos octavos de ida de la Champions League y de la ida de los dieciseisavos de final de la Europa League, esta semana tocan más partidos europeos. Toca la segunda mitad de los octavos de final y tocan los partidos de vuelta de la Europa League. Pero hoy, como la semana pasada, hay que analizar los otros cuatro partidos de octavos de final de la UEFA Champions League.

Copenhague - Chelsea
Hace unos meses, nadie habría dudado del Chelsea. El Copenhague es el equipo más débil de los octavos de final y el Chelsea era uno de los equipos que estaba en la lista de candidatos al título hace unos meses.
Pero ahora el Chelsea no está bien. El pasado sábado cayó en la quinta ronda de la FA Cup (contra el Everton en la tanda de penaltis) y sus últimos tres meses no han sido nada buenos. El Chelsea, desde que perdió contra el Liverpool el 7 de noviembre de 2010, ha perdido 7 partidos (incluyendo este contra el Liverpool), empatado otros 7 (contando los dos de la FA Cup contra el Everon) y ha ganado los 7 restantes (incluyendo un partido de FA Cup contra el Ipswich Town, 7-0). En este último trimestre, sólo han ganado uno de cada tres partidos. Una cifra demasiado baja para un equipo que quiere aspirar a ganarlo todo. Parece que ni el fichaje de Torres va a solucionar la situación a cotro plazo, se habla de que falta un creador de juego, pero habrá que mejorar, primero, la confianza del grupo.
El Copenhague, por su parte, no juega un partido oficial desde el último de la fase de grupos de la Champions, contra el Panathinaikos. Desde entonces ha jugado 6 amistosos, ganando 4 de ellos y empatando los otros dos. Con la buena actuación en la fase de grupos en mente, no me parecería descabellado ver una victoria corta a su favor en el partido de ida y un empate en el de vuelta. Pero el Chelsea sabe que la Champions League es su última oportunidad para hacer algo bien esta temporada. Serán favoritos, pero tampoco tanto como hace dos meses.

Copenhague - Chelsea 44-56%

Olympique Lyonnais - Real Madrid
Con este partido ya tenemos una sensación de déjà vu. Hemos visto varios partidos entre Lyon y Madrid en los últimos años, también algunos contra el Barcelona, y el Lyon ha podido con el Madrid más veces de lo esperado. El año pasado, la última ocasión. Pero no creo que este año vuelva a ocurrir lo mismo.
El Madrid llega mejor que el año pasado. El equipo me parece mejor, reforzado respecto a la temporada pasada y con un entrenador ganador, para el que no hacer una buena actuación en Champions (se puede discutir dónde ponemos el listón) sería un fracaso. El Lyon, sin embargo, es un equipo tremendamente irregular. Imprevisible. Hace un partido bueno, luego otro malo y luego gana un partido en el que no ha hecho casi nada. Gomis está a un buen nivel y ha desplazado a Lisandro a la banda. El fichaje de Gourcuff ha mejorado la calidad del centro del campo. Lovren está demostrando ser un muy buen defensor y de Lloris ya ni hablamos.
Ambos equipos han mejorado si los comparamos con lo que eran la pasada temporada. Pero, para mí, el Madrid ha mejorado más. Tiene que ser el favorito y tiene que demostrar que puede pasar de octavos de final. Porque tiene equipo para hacerlo. Llevan muchos años sin llegar a cuartos y ésta va a ser una buena oportunidad, veremos si la aprovechan.

Olympique Lyonnais - Real Madrid 42%-58%


Olympique de Marsella- Manchester United
Personalmente, es una eliminatoria que me atrae muchísimo. El OM es un equipo interesantísimo, formado por buenos jugadores y que rindió a un buen nivel en la fase de grupos. Pese a las dudas de Remy, Brandao y Valbuena, parece que los tres jugadores del equipo francés estarán preparados para el partido del miércoles. Si la lucha por el liderato de la Ligue 1 no les distrae demasiado, pueden poner en problemas al Manchester United.
Pero el OM lo tendrá difícil, ya que el Manchester United va a jugar con todo. No estarán Park, que poco después de volver de la Copa Asia se lesionó, ni Valencia, lesionado hace ya mucho tiempo y Ferdinand es duda. Excepto esta última baja y pese a la importancia de Park, el United es un equipo suficientemente sólido como para ganar en Marsella, un campo siempre complicado.

Olympique de Marsella- Manchester United 40-60%

Inter de Milán-Bayern de Múnich
La reedición de la pasada final de la Champions. El Inter llega en un momento no demasiado bueno. Con Benítez destituido tras ganar el Mundial de Clubes, llegó Leonardo. Y aunque los resultados han mejorado, el equipo no me acaba de convencer. Perdieron ante Juventus y Udinese en sus dos partidos más serios y ganaron ante Palermo y Fiorentina por muy poquito y gracias a goles importantes de Pazzini. También ganaron a la Roma (5-3), pero el Inter no me transmite las mismas sensaciones de seguridad del año pasado. Ha llegado Pazzini, Kharja, Ranocchia y Nagatomo, pero el primero no va a poder jugar el miércoles. Una lástima.
El Bayern tampoco acaba de convencer. Tercero en una Bundesliga liderada por un gran Borussia Dortmund y por detrás de un buen Bayer Leverkusen, el Bayern es un equipo irregular. La defensa no es nada sólida, formada por Tymoschuk y Badstuber. Luego está Pranjic en el centro del campo y Luiz Gustavo en el lateral zurdo, intercambiados, jugando ambos en una posición que no es la suya. Decisiones difíciles de comprender. Pero si Müller, Ribery, Robben y Mario Gómez tienen un buen día (con la ayuda de Kroos y Schweinsteiger), el Bayern puede acabar con el Inter. No hay que olvidarlo. Por esto creo que la eliminatoria va a estar muy igualada y que no se va a decidir hasta el partido de vuelta

Inter de Milán-Bayern de Múnich 50%-50%

Saber competir

Axel Torres hablaba hoy en Marcador Internacional de que el Everton era un equipo que siempre competía, que contra los grandes siempre plantaba cara y les creaba problemas. Hoy hemos visto un ejemplo de ello en el intensísimo y emocionante Chelsea-Everton, pero también hemos podido ver como el Brighton de Gustavo Poyet y el Crawley competían ante equipos de Premier League. Porque el fútbol merece la pena cuando ambos equipos compiten por ganar. Cuando lo intentan. Pese a que el nivel de un equipo sea (muy) inferior al otro, si le pone ganas, el equipo pequeño tiene sus (bastante reducidas) opciones de victoria. Porque el fútbol es cuestión de competir.

El Everton compitió. Puso en problemas al Chelsea durante 120 minutos. Y acabó ganando. Los primeros 90 minutos fueron muy intensos y muy buenos, con ocasiones para ambos equipos, con alternativas. Pese a que no se vieron goles en los primeros 90 minutos, su visionado mereció la pena. Los siguientes 30 minutos, fueron incluso mejores. Ambos equipos no querían llegar a la tanda de penaltis y el gol del Chelsea llegó primero. En el minuto 103, Baines permite centrar bastante cómodamente a Anelka, Drogba la controla con el pecho, pero el control se le va largo, y consigue dar una asistencia (involuntariamente) a Lampard. Pero el partido no se había acabado. El Everton puso ganas y siguió compitiendo. Y al final, en el minuto 119, Baines marcó un golazo de falta para forzar la tanda de penaltis. El mismo Baines falló el primer penalti (buena parada de Cech), pero luego Anelka y Cole fallarían y el Everton se acabaría llevando el partido. Ambos partidos estuvieron terriblemente igualados y la tanda de penaltis al final del replay reflejó esta igualdad. Éste era el único replay de la pasada ronda jugado hoy, el resto ya eran de la quinta ronda de la FA Cup.

Hoy jugó el Brighton. El Brighton and Hove Albion de Gustavo Poyet. Un equipo que está de moda por su buen juego que le ha convertido líder de la Ligue One ante la sorpresa de su propio entrenador, que no se esperaba un rendimiento tan bueno tan pronto. El partido no empezó bien para ellos. En seguida el Stoke City se puso con un 2-0 a favor. Entonces me pasé a ver el Dortmund-St. Pauli, un buen partido. Y volví a falta de unos 15 minutos del final. Cuando el Brighton tenía el balón. Y lo movía bien, con bastante criterio e intención. El Stoke ya había hecho su trabajo, el marcador reflejaba un claro 3-0, pero el Brighton demostró que tenía calidad. Demostró que es un equipo que puede jugar en la Championship y mantenerse si conserva el bloque. El Brighton compitó ante un equipo de mayor nivel, pese a que el resultado no acompañó. Un equipo fuerte, más experimentado y con más oficio. No tuvo la posibilidad de ganar el partido, pero demostró que el equipo tiene un nivel bastante bueno. No como para competir en la Premier League, pero sí como para ser el mejor equipo de la Ligue One y un buen equipo en la Championship.

Después del Brighton, llegó el Manchester United-Crawley Town. El líder de la Premier League contra el segundo clasificado de la quinta división inglesa (por detrás del nuevo Wimbledon). Y el líder de la Premier League ganó por 1-0. Con gol del central Brown a la salida de un córner sacado en corto, tras un buen centro de Gibson. El Manchester United jugó con los suplentes y no hizo un buen partido. El equipo era bastante serio, con bastantes jugadores del primer equipo como para ganar más cómodamente al Crawley, que le quitó el balón al Manchester United por momentos. En el minuto 28 el partido se decidió, con ese gol de Brown, pero el Crawley compitió. Jugó por encima de las expectativas. Movió el balón bastante bien acorde con su nivel. Creó jugadas de peligro, sobre todo en la segunda mitad. E incluso remató al larguero casi al final del partido. No está nada mal jugar así ante un equipo en el que Rooney jugó toda la segunda mitad, en la que casi no tocó el balón. Los aficionados del Crawley pueden estar orgullosos de su equipo, que plantó cara al Manchester United y llegó a soñar con un replay al final del partido. No lo consiguió, pero esto no resta mérito al buen partido hecho por su equipo. Un equipo formado por jugadores no profesionales, que juegan cuatro divisiones por debajo de su rival y que han podido jugar en Old Trafford, cumpliendo uno de sus sueños como futbolistas.

Estas cosas hacen especial a esta gran competición. Porque esto es la FA Cup, una competición mágica, distinta, en la que los equipos más modestos sueñan con ganar a los equipos más grandes en su propio estadio. En la que todos los equipos federados sueñan con llegar a Wembley algún día. Hoy el Crawley Town estuvo cerca de llegar a cuartos de final. Pero no pudo ser, una pena.

Vuelven las competiciones europeas

Esta semana vuelven la Champions League y la Europa League. Vuelven las dos grandes competiciones europeas por excelencia y vamos a ver grandes partidos. Esta misma semana vamos a tener 4 partidos de Champions League y 16 de Europa League (demasiados para mi gusto). En todos ellos hay detalles que hay que apreciar, cosas que ver. Jugadores a los que seguir, tácticas que estudiar y goles que observar. Pero, primero, empiezo con una pequeña previa de los 4 partidos de Champions que tenemos esta temporada.

Milan-Tottenham
Hace un par de meses, en diciembre, cuando se realizó el sorteo, el Tottenham estaba en un muy buen momento de forma. Fue primero de grupo en el grupo A, el más difícil e igualado de esta Champions League. Quedó por delante del Inter, Twente y Werder Bremen, haciendo muy buenos partidos, sobre todo en casa.
El Milan lideraba la Serie A, si no recuerdo mal, pero sin convencer. Era líder por deméritos del Inter y de la Juventus, por la irregularidad del Palermo, pese a los intentos del Napoli y de la Lazio para oponerse al liderato rossonero. El Milan se ha reforzado bastante bien en el mercado de invierno, con Emanuelson, Van Bommel, Cassano y Dídac Vilà (me niego a considerar a Legrottaglie como un buen refuerzo). Ninguno de estos 4 jugadores puede jugar la Champions: los tres primeros ya la han jugado y el último no está ni inscrito.
Pero, pese a ello, creo que el Milan es favorito. Porque tiene una plantilla bastante profunda, con jugadores como para compaginar la Serie A y la Champions League. Hay jugadores para rotar y, además, ni Bale ni Modric están en un buen momento de forma. Bale no ha viajado a Milán con el equipo y Crouch y Modric son duda hasta última hora. Estas bajas, unidas a las de Huddlestone, Jenas, Kaboul y King debilitan mucho al Tottenham, que creo que no va a pasar ante un sólido Milan al que tampoco le veo demasiado futuro en la Champions League este año.

Milan-Tottenham 57 %-43%

Valencia-Schalke 04
Sorprendentemente, el Schalke fue campeón de su grupo en la Champions League. En un grupo en el que estaban también el Olympique de Lyon, el Benfica y el Hapoel de Tel-Aviv, el Schalke fue el equipo que mejor resultados consiguió. El equipo de Gelserkirchen parece que se tomó más en serio la Champions que la Bundesliga, competición en la que van décimos, y finalmente consiguieron la primera plaza del grupo. El equipo ha fichado mucho esta temporada, incluso en invierno. Karimi y Charisteas son sus únicos refuerzos para esta Champions League (Annan, como Cassano, ya jugó la fase previa) y su defensa apenas ha mejorado a lo largo de la temporada.
El Valencia, por su parte, está a un nivel de forma parecido al que tenía en diciembre. Ya es tercero en la Liga BBVA y desde el cuatro de diciembre, cuando perdió 2-0 contra el Real Madrid, sólo ha perdido un partido (4-2 ante el Villarreal en Copa del Rey). El Valencia es un equipo sólido, difícil de ganar y que, probablemente, jugará con un sólo punta para reforzar su centro del campo. Me parecen mejor equipo que el Schalke y, sobre todo, un equipo más regular. Por eso, creo que el Valencia es favorito, aunque uno no se puede fíar demasiado de este Schalke, que tiene mucha calidad arriba.

Valencia-Schalke 04 60%-40%

Roma-Shakhtar Donetsk
Es una de las eliminatorias que más me gusta. Muy igualada, con dos equipos de un nivel parecido. Roma y Shakhtar son dos equipos que no son TOP, que no son candidatos a ganar la Champions, pero que pueden poner en problemas a cualquiera. Tras un inicio dubitativo, la Roma consiguió superar sin demasiado sufrimiento a Basilea y Cluj en su grupo mientras que el Shakhtar Donetsk aprovechó dos pájaras del Arsenal para arrebatarle al equipo de Arsène Wenger el liderato del grupo H.
Ambos equipos son sólidos y están bien formados. Buenas defensas, jugadores interesantes en el centro del campo e imaginación arriba. Menez, Vucinic, Douglas Costa o Willian son jugadores a tener muy en cuenta. Personalmente, me encanta la defensa del Shakhtar Donetsk, formada por la línea Srna-Chigrinsky-Rakitskiy-Rat. Jugadores de mucha calidad que creo que acabarán imponiéndose a la Roma. Aunque la poca experiencia del Shakhtar en Champions League (es la primera vez que llegan a octavos de final, pese a que han cuajado buenas actuaciones en la UEFA, ganaron la edición el año 2009), puede acabar costando factura al equipo ucraniano, al igual que su estado de forma, pues cabe recordar que han estado este invierno de pretemporada, pues la liga ucraniana está parada, aunque fueron subcampeones de la Copa del Sol, un interesante torneo de equipos del este y del norte de Europa. El último partido oficial que disputaron fue de Champions League, hace más de dos meses.

Roma-Shakhtar Donetsk 45%-55%

Arsenal-Barcelona
Junto al Inter-Bayern, la mejor eliminatoria de los octavos de final de la Champions League. Una eliminatoria sobre la que no creo que haga falta escribir mucho. El Arsenal y el Barça juegan de un modo parecido y el equipo que tenga más el balón tendrá ventaja. Pero quitarle el balón al Barça no es nada fácil, y menos en una eliminatoria a doble partido. Sin Sagna en el partido de ida, el Arsenal puede sufrir en defensa. Parece que tampoco estará Nasri, otra baja sensible que Arshavin tendrá que cubrir. Si el ruso se propone hacer un buen partido, puede hacer mucho daño al Barça. Pese a su irregularidad, sigue teniendo muchísima calidad en sus piernas. También dependerán gran parte de las probabilidades de éxito del Arsenal del momento de forma de Van Persie, que está siendo muy dulce. El holandés tendrá que aprovechar al máximo todas sus oportunidades si quiere tener opciones de jugar en cuartos de final.
Pese a que hagas todo muy bien contra el Barça, éste puede destrozarte. Messi ya acabó, él solito, con el Arsenal el año pasado en el Camp Nou. También el año pasado, aunque en el partido de ida, el Barça cuajó sus veinte mejores minutos de la era Guardiola. Los mejores. En los que creó más ocasiones, en los que jugó mejor, en los que ahogó a su rival... en los que faltó un gol.
Muy probablemente, esta vez la eliminatoria será distinta. El Barça es mejor equipo que el año pasado, pero también lo es el Arsenal, que está más maduro. Va a estar igualado, aunque creo que el Barcelona es superior y lo va a acabar demostrando.

Arsenal-Barcelona 42%-58%

Una apuesta con cabeza

El Celtic de Glasgow es un equipo especial, distinto. Este club católico y con raíces irlandesas siempre me ha gustado más que el Glasgow Rangers, equipo protestante y unionista de Glasgow. El Rangers ha ganado más ligas que el Celtic (53 a 42), pero el Celtic ha ganado un título de Copa más (33 a 34 sin contar las Copas de la Liga). Cada año se disputan un mínimo de cuatro partidos entre ambos equipos, los llamados Old Firm. Y esta temporada, afortunadamente, vamos a ver un total de 7 Old Firms (3 de ellos ya se han disputado con una victoria para cada equipo y un empate).

Pero no quiero hablar de los Old Firms ni del Rangers. Quiero hablar del Celtic y de sus futbolistas. Porque el Celtic es un equipo muy atractivo y bonito de ver. Lleva un par de años fichando muy bien, fichando a centrocampistas buenos técnicamente, que tocan muy bien el balón. Este buen gusto para fichar a jugadores, la mayoría de ellos jóvenes, como Ki Sung-Yueng (1989), Efraín Juárez (1988), Joe Ledley (1987), Beram Kayal (1988) y a Kris Commons (1983) para jugar en el centro del campo en el último año y medio es una muy buena muestra de que en Celtic Park hay jugadores que mueven muy bien el balón. Además del capitán Scott Brown o Marc Crosas (desafortunadamente no juega casi nada) que también llevan varios años en el equipo, pero con la excepción de Freddie Ljungberg, cuyo fichaje no acabo de comprender.

Pero la apuesta del Celtic FC de fichar a jugadores jóvenes no se reduce sólo a los jugadores de toque que han fichado en el último año y medio, sino que también han fichado a jugadores jóvenes para otras posiciones. Han fichado a un buen portero polaco, Zaluska (1982), y han conseguido la cesión de un joven portero del Newcastle (Forster). En defensa han fichado al espigado central noruego Thomas Rogne (1990), al hondureño Emilio Izaguirre y a Christian Mulgrew (ambos de 1984), además del veterano central sueco Daniel Majstorovic (1977) y al buen lateral coreano Cha Du Ri (1980).

Y luego está la delantera. Formada por Gary Hooper y Anthony Stokes, dos jugadores nacidos en 1988 y que destacaron bastante en sus anteriores equipos. Ambos han marcado 11 goles en liga y están haciendo una temporada muy destacable, que quizás los lleve pronto a otra liga más potente y prestigiosa que la Scottish Premier League.

El equipo del Celtic FC tiene muy buena pinta. Está formado por jugadores muy jóvenes, talentosos y con mucho potencial. A los nombrados anteriormente hay que añadir el joven James Forrest, jugador de banda derecha nacido en 1991, y a otros que pese a no ser tan jóvenes, también aportan bastante al equipo como es el caso de Paul McCourt, Shaun Maloney o Georgios Samaras, que tampoco está jugando mucho pero que hizo su mejor partido de la temporada en Ibrox Park ante el Rangers el dos de enero de este mismo año. La propuesta de juego del Celtic es muy atractiva. Es un equipo al que hay que intentar ver con frecuencia, pues no acostumbra a decepcionar. Este año están luchando por la liga con el Rangers (tienen dos puntos de ventaja, pero han jugado un partido más que el Rangers), por la Copa de la Liga (están en la final, que jugarán contra el Rangers el día 20 de marzo) y por la Copa escocesa (tienen que jugar el replay en Celtic Park el dos de marzo contra el Rangers para estar en cuartos de final). La buena política de fichajes del Celtic está dando buenos resultados y los seguirá dando, pues es una apuesta que a medio y largo plazo, e incluso a corto plazo, va a dar grandes resultados. Como mínimo, espero que el Celtic de Glasgow esté en la fase de grupos de la próxima UEFA Champions League. Porque no creo que todos estos jugadores vayan a durar mucho tiempo en Celtic Park aunque, si lo hicieran, el Celtic podría a volver a ser un equipo de un nivel parecido a la época de Henrik Larsson.

El Udinese, un equipo al alza

El Udinese es un equipo al que admiro. Creo que lo descubrí cuando se relacionó a Iaquinta con el Barça. Un año más tarde jugaron Barça y Udinese en la Champions League y coincidieron en el mismo grupo. Entonces apenas conocía al Udinese, pero el equipo me gustó bastante. No es uno de los grandes de Italia y desde la temporada 2004-05, en la que acabaron cuartos, no han vuelto a estar entre los 6 primeros. Pero este año vuelven a estar a un buen nivel tras el decimoquinto puesto conseguido el año pasado.

El Udinese fue decimoquinto la pasada temporada, pese a los 29 goles de Di Natale. Al Udinese le fue mal, aunque tampoco sufrió mucho y acabó a 9 puntos del descenso. Y la temporada 2010-11 también empezó mal. El Udinese perdió los primeros cuatro partidos (Genoa, Inter, Juventus y Bolonia) y empató el quinto (Sampdoria). Pero Guidolin, entrenador del Udinese, siguió en el cargo pese a la mala racha y el Udinese consiguió remontar el vuelo tras ganar los siguientes 4 partidos de la Serie A y empatar el quinto, compensando así la mala racha de inicio de temporada. Los meses de noviembre y de diciembre estuvieron marcados por la irregularidad, pero el Udinese no pierde en liga desde el último partido del año 2010, cuando perdió contra la Lazio por 3-2.

Desde entonces el Udinese ha ganado 5 partidos y ha empatado 2 de liga. Cayó ante la Sampdoria en Coppa, en los penaltis, pero ayer se vengó y les derrotó por 2-0 en un buen partido. Pero, sobre todo, destacan los equipos contra los que el Udinese ha sacado buenos resultados. Ha ganado al Genoa, Inter, Juventus y Sampdoria, además del sólido Chievo, y empató contra el Milan en San Siro y contra el Bolonia.

Y esta mejora no es casualidad. El Udinese es uno de los equipos que marca más goles, pero también uno de los que más recibe. Esto es así porque el Udinese es un equipo muy de Bundesliga, un equipo que juega con un 5-3-2, pero que en la mayor parte de partido es un 3-5-2 y es un equipo propenso a recibir contraataques y a partirse en dos. Es un equipo que se preocupa más por atacar, por crear juego, por marcar goles que por intentar dejar su portería a cero. Destaca su buen nivel ofensivo, con dos carrileros muy largos (Isla y Armero) que están a un gran nivel de forma y tres mediocentros (Inler, Asamoah y Pinzi/Abdi) que tratan bien el balón, lo mueven con criterio y buscando contactar con los dos delanteros. Pero el buen momento del Udinese se basa, sobre todo, en los dos jugadores que tiene en punta: Antonio Di Natale y Alexis Sánchez.

El primero marcó ayer su gol número 100 con el Udinese. Ya se convirtió en el máximo goleador de la historia del Udinese la temporada pasada, en la que marcó 29 goles y superó el registro de Bierhoff de jugador con más goles de un jugador del Udinese en una temporada en la Serie A (con 27 goles en la temporada 1997-98). Di Natale es un delantero nato, ese delantero que siempre marca de todos los modos posibles y que cada año, pese a ser todo un veterano, sigue marcando goles. Y luego está Alexis Sánchez, un escándalo de jugador. En su tercera temporada en el Udinese ha marcado más goles que nunca en la Serie A (3 en la primera temporada, 5 en la segunda y 7 en lo que llevamos de ésta) y está a un nivel estratosférico. Alexis Sánchez ha mejorado mucho, ahora sabe cuándo debe soltar el balón, cosa que antes parecía imposible. Da muchas más asistencias, la de ayer a Di Natale es un ejemplo de ello, y ha aprendido que el fútbol es un deporte colectivo y no individual, que necesita a sus compañeros para rendir mejor, pues él les debe ayudar y ellos le ayudarán a él. También ha sido relacionado con el Inter y no tardará en salir visto el gran rendimiento de esta temporada. Pero el Udinese le ha conseguido retener en enero y le va a necesitar. Porque Alexis Sánchez es un jugador TOP.

PD: Siempre que se habla del Udinese, hay que recordar su buen trabajo en la contratación de jóvenes talentos. Aunque esto también es un problema, pues muchos jugadores - demasiados en mi opinión - tienen que irse cedidos a otros equipos para que jueguen. El Udinese tiene a 11 jugadores en copropiedad con otros equipos (destacan Fabbrini, Rossini y Tissone) y a 51 cedidos. De estos 51 jugadores que están cedidos, 14 de ellos están en el Granada y entre los 37 restantes están jugadores como Antonio Candreva, Marco Motta, Jaime Romero, Rafael Romo o Felipe Sanchón. Esta gran cantidad de jugadores que maneja el Udinese hace que algunos se pierdan y no acaben jugando en el propio Udinese. Porque este equipo con Candreva sería todavía mejor.

Tapando agujeros (Parte II)

Habiendo analizado anteriormente los fichajes de la Premier League, Serie A y Bundesliga, toca pasar a los fichajes más frikis, a los fichajes de ligas menores y menos conocidos que destacaron en este mercado de invierno.

Uno de los países en los que se han visto más fichajes es Turquía. El mercado de enero empezó con los fichajes de Simao, Hugo Almeida y Manuel Fernandez por el Besiktas, tres jugadores portugueses que van a mejorar al Besiktas para que intente luchar por el título de liga turco (y ya lo están haciendo). En Turquía también se ha reforzado el Galatasaray con Stancu y Zapata, dos jugadores del Steaua de Bucarest, y con Culio del Cluj. Además del Bursaspor, con el fichaje del delantero escocés Kenny Miller. El líder, el Trabzonspor, ha fichado a los gemelos Brozek del Wisla de Cracovia.
Además del fichaje de Freddy Adu por el Rizespor de la segunda división turca, también Amrabat y Azofeifa han llegado a Turquía. El primero, una de las promesas del PSV Eindhoven, ha fichado por el Kayserispor (4º clasificado) y el segundo, del Gent, ha fichado por el Gençlerbirligi.

También se han producido traspasos en la Eredivisie. Uno de los equipos que más ha fichado ha sido el Feyenoord, que ha conseguido las cesiones de Simon, un húngaro de 19 años del Ujpest, a Larsen, delantero danés del Toulouse, y Ryo Miyaichi, cedido por el Arsenal. Además, el Feyenoord ha recuperado al portero Kostas Lamprou, que estaba cedido en el Excelsior y ha fichado al defensa Swerts, del AZ Alkmaar. También se conoció esta misma semana que Luc Castaignos se irá en verano al Inter de Milán.
Pero no sólo el Feyenoord ha fichado en el mercado de invierno. También el Vitesse de Chapi Ferrer, que ha conseguido la cesión de Martí Riverola (Barça B) y ha fichado al español Jordi López (Swansea), a Babangida (Mainz) y a un defensa japonés del Gamba Osaka, Michichiro Yasuda. Tampoco hay que olvidar la incorporación de Onyewu, que viene cedido del Milán, al Twente. Si consigue jugar de forma regular, puede ser el mejor fichaje de enero en la Eredivisie.

Pero, probablemente, uno de los equipos que mejor se ha reforzado este invierno es el Dnipro Dnipropetrovsk, ese equipo ucraniano que entrena Juande Ramos. Han fichado a Samuel Inkoom (Basilea), a Giuliano (Internacional de Porto Alegre), a Ivan Strinic (Hadjuk Split) y a Matheus (S. Braga), además de recuperar a 8 jugadores cedidos al Krybas ucraniano. En Ucrania también destacan 2 jugadores argentinos que llegan al Metalist Kharkiv: Sebastián Blanco (Lanús) y Jonathan Cristaldo (Vélez).

En Brasil hemos podido ver cómo Liedson y Ronaldinho han vuelto a su país natal. El primero, ha vuelto a Corinthians, su último equipo en Brasil antes de irse al Sporting, dónde ha estado en los últimos 8 años. El segundo, del Milán, se ha marchado al Flamengo tras sonar para varios equipos brasileños. Además, Elano confirmó su vuelta al fútbol brasileño el pasado mes de noviembre. Además, el Botafogo ha fichado al uruguayo Arévalo Ríos y el Flamengo ha conseguido la cesión de Thiago Neves.

Otros fichajes para destacar son el de Juan Manuel Iturbe (Quilmes) por el Porto o el de Joao Carlos Pinto Chaves (Genk) por el Anzhi ruso o las incorporaciones de El-Hadji Diouf y Healy como cedidos al Rangers, contrarestadas por el Celtic con las incorporacioens de Ljungberg y Commons.

PD: El pasado lunes volví a participar en el programa Play Fútbol, de la Cadena Ser. Hablé sobre el fútbol de un país emergente futbolísticamente hablando, que ya está en la decimoséptima posición del ranking FIFA. Escuchadlo y sabréis de qué hablo.

Tapando agujeros (Parte I)

Este mercado de fichajes de enero ha sido uno de los más movidos de los últimos años. Han habido muchísimos traspasos, han habido muchos jugadores que han cambiado de equipo y los clubes no han dudado en pagar lo que fuera necesario por algunos jugadores. Este enero se ha oído muy poco eso tan típico de: "los fichajes de invierno suelen salir mal, acostuman a rendir peor que los de verano, pues se hacen con prisas, etc."

Empezemos por los movimientos más llamativos en Inglaterra. Más allá de lo relacionado con el Chelsea y Liverpool (compra de Torres y David Luiz por el Chelsea y de Luis Suárez y Carroll por el Liverpool) o del fichaje de Dzeko por el Manchester City, se han producido varias operaciones muy interesantes. El Sunderland ha fichado a Sessegnon y a Muntari, dos jugadores que le van a venir bien al equipo. El primero, de Benín, aportará velocidad y desequilibrio al equipo. El segundo, de Ghana y que está cedido por el Inter, aportará fuerza y agresividad en el centro del campo y quizás pueda acabar sustituyendo a Cattermole, que es amonestado con demasiada frecuencia. Pese a la baja de Bent, el Sunderland ha conseguido reforzarse bien este enero. Otro equipo que ha hecho las cosas bien en este mercado de invierno es el Aston Villa de Houllier. Además de fichar a Darren Bent, sinónimo de gol, han conseguido la cesión de Bradley y el traspaso de Makoun para reforzar un centro del campo algo flojo. Pero del Aston Villa se ha marchado Ireland, que ha sido cedido al Newcastle tras su mal inicio de temporada. Aunque es un jugador que no se parece en nada a Carroll, es el único refuerzo de los Magpies este invierno. Además, la marcha de Pienaar al Tottenham o las cesiones de Kakuta al Fulham y de Vela al West Bromwich Albion son otros movimientos que merecen ser destacados.

En Italia, el mercado lo ha acaparado el Inter de Leonardo. Tras marcharse Benítez poco después de pedir refuerzos, Leonardo ha visto como Pazzini, Nagatomo, Kharja o Ranocchia se han incorporado a su equipo para dar más profundidad a la plantilla del equipo campeón de Europa. Las incorporaciones de Pazzini, ya hizo un partidazo este domingo contra el Palermo pese a jugar 45 minutos, Nagatomo, uno de los mejores jugadores de la Copa de Asia, o Ranocchia, uno de los mejores centrales jóvenes de Italia, darán fuerza al Inter para luchar por el título de liga. También dos españoles han dado el salto del RCD Espanyol a la liga italiana: Víctor Ruiz y Dídac Vilà. El primero se incorpora al Napoli, equipo en el que puede tener un papel muy importante y al que refuerza junto a Mascara. El segundo refuerza a un Milán que también ha fichado a Cassano, Emanuelson, Van Bommel y Legrottaglie, fichajes que transmiten sensaciones diferentes, algunos de ellos (Cassano-Legrottaglie) incluso opuestas. Precisamente Legrottaglie ha dejado la Juve, igual que lo ha hecho Amauri, cedido al Parma. La Juventus se ha reforzado con dos grandes delanteros, Luca Toni y Alessandro Matri, cedido por el Cagliari. Además, hay que destacar los fichajes de Andelkovic y Kurtic, dos eslovenos más, por el Palermo, el tropel de fichajes del Genoa (cesiones de Boselli y de Floro Flores, fichajes de Konko, de Kucka, Jelenic y Paloschi, además de varias bajas) y el bajón de calidad de la Sampdoria, que ha perdido a Cassano y a Pazzini, que han sido sustituidos por Macheda y Maccarone.

Para acabar el resumen, aunque faltan varias ligas y fichajes por comentar, falta la Bundesliga. El Bayern se ha reforzado con Luis Gustavo, pero Van Gaal ha dejado marchar a jugadores como Van Bommel, Demichelis, Alaba y Braafheid, arriesgándose a tener una plantilla más corta y más débil ante posibles lesiones y/o sanciones. Aunque, realmente, el gran agitador del mercado en Alemania ha sido el Wolfsburgo. Pese a que ha vendido a Dzeko, han invertido bien el dinero recibido, fichando a Helmes, uno de los mejores delanteros alemanes, Koo Ja-Cheol, una de las revelaciones de la Copa de Asia, al joven Yohandry Orozco, el mejor jugador de la selección venezolana que ha disputado el Sudamericano sub 20,a Dieumerci Mbokani y a Tuncay Sanli, éstos dos últimos son buenos jugadores que completarán un buen fondo de armario para el Wolfsburg. Además, varios equipos de la Bundesliga han decidido apostar por futbolistas japoneses, como es el caso del Colonia, que ha fichado al defensa Makino, y del Stuttgart, que ha fichado al delantero Okazaki.