Algo más que un título

He hablado mucho sobre el Fulham en este blog y, en menor medida, también he hablado sobre el Hamburgo. Me centro en esta elminatoria porque atrae a menos público que la que juegan el Atlético y el Liverpool, pero hoy quiero plantearla desde otro punto de vista.

Esta tarde, leyendo la charla de Marca con Axel Torres apareció una pregunta que trataba sobre los grandes equipos que llevan unos cuantos años monopolizando las competiciones nacionales y locales y las competiciones europeas. Citaba al Alavés de 2001 y al Porto de 2004, dos equipos que pasaron a la historia por sus hazañas europeas, en la UEFA Cup y en la Champions League respectivamente, siendo el Alavés subcampeón y el Porto campeón. Para poner un ejemplo: ¿quién se acuerda de ese Kaiserlslautern de 2001, semifinalista de la UEFA y en el que jugaban un joven Klose y un Djorkaeff ya viejo y apunto de retirarse? ¿Quién se acuerda de ese Boavista semifinalista de la UEFA 2003, que cayó por poco en Celtic Park? ¿Quién se va a acordar de ese Steaua de Bucarest que llegó a las semifinales de la UEFA de 2006? Hasta pocos se acordarán de las remontadas del Middlesbrough ante el Steaua o el Basilea en esa misma edición de la UEFA. También se acordarán pocos de esa bolita de papel que eliminó al Hamburgo el año pasado, ya que provocó un córner que acabó en un gol decisivo.
En Champions pasa lo mismo, y es que realmente pocos se van a acordar dentro de unos años de ese Monaco o ese Deportivo de 2004, del PSV de 2005 o del Villarreal de 2006.

Realmente pocos de estos equipos que acabo de citar van a ser recordados y el Fulham de 2010 seguro que quedará en el olvido si no pasa a la final de la Europa League, aunque no la gane, y será recordado para siempre si gana al Europa League, por ser un equipo modesto, por levantar la primera edición de la nueva Europa League, por su recorrido.
Igual pasará con el Hamburgo, que si pasa a la final pasará a la historia, para bien o para mal, porque jugará la final como "local", la jugará en casa, en su propio estadio. Si la pierde, pasará la historia por perder "su" final de la Europa League, si la gana pasará a la historia como el primer equipo que gana la nueva edición de la Europa League y como un equipo que ganó en su ciudad la segunda competición europea, tercero en jugar una final en su ciudad tras Feyenoord y Lisboa, ambos equipos con una suerte distinta en su "final".

Este Fulham que tanto me gusta, que es organizado, que se siente cómodo defendiendo al contrario sin balón, contraatacando, moviendo el balón, que tiene a buenos jugadores como Gera, Etuhu, Dempsey o Zamora que son muy buenos sin llegar a ser estrellas... todo puede ser muy bonito, pero necesitan una final para perpetuarse y hacer su primer huequecito en la historia europea.
El Hamburgo es un equipo con más tradición, que necesita ganar para recuperar las pasadas glorias, ya que el equipo parece haber entrado en unos últimos años sin suerte tanto en la competición doméstica como en competiciones europeas.

Ambos quieren hacerse un hueco en la historia del fútbol europeo, en la historia de la primera edición de la Europa League, pero sólo uno conseguirá hacerlo, y para hacerlo deberá aprovar el examen en Craven Cottage el próximo jueves...