La última jornada de la Eredivisie ha sido atípica, con un Twente que se ha dejado puntos en casa ante el RKC Waalwijk, un AZ que se ha olvidado de su mal momento goleando a un Vitesse sin Bony o con un Amsterdam ArenA cubierto que ha cedido parcialmente por la acumulación de nieve. Aunque lo más sorprendente llegó el viernes, en el partido inaugural. Entonces apareció en escena el PEC Zwolle, un equipo de la parte baja que sólo había ganado tres partidos, para sorprender y vencer al PSV en Eindhoven.
La victoria del Zwolle no fue un mero accidente, un pequeño despiste de un PSV que domina y no transforma sus ocasiones. No fue así. Realmente merecieron la victoria, con una puesta en escena magistral y con unos jugadores modestos que se creyeron capaces de ganar a cualquiera. Parecieron un equipo grande y además transformaron las pocas ocasiones que tuvieron. El Zwolle fue capaz de salir al contraataque en varias ocasiones a lo largo del primer tiempo y siempre con muchos jugadores llegando al área. En una de estos ataques van den Berg se disfrazó de genio engañando a Zanka Jorgensen con sólo un pequeño amago con el cuerpo y tras varios rebotes el balón lo empujó Benson. Merecido tanto entonces que transmitía la sensación de que al equipo de Langeler le salía todo bien. Con recursos mucho más limitados fueron capaces de hacer mucho más.
Sin embargo, el Zwolle tuvo un tramo en el que tuvo que sufrir. Y supo sobrevivir a él. Acabó agotado físicamente el primer tiempo y el PSV lo encerró en su campo hasta conseguir empatar el partido. Esta dinámica fue la que se impuso también en los primeros instantes de la segunda mitad hasta que, en la única que tuvieron, Benson aprovechó un desajuste defensivo para volver a adelantar a su equipo. Entonces el Zwolle se transformó y pasó de ser el decimotercero clasificado a disfrazarse de equipo digno de competición europea.
Por ambas bandas Mokhtar y Gravenbeek crearon peligro de manera constante. El rival se lanzó al ataque y dejó vacía la posición que ocupaban sus laterales, por lo que tenían espacio y tiempo para correr. Entre ellos se encontraba Benson, el autor de los dos tantos, que estuvo mejor en los primeros sesenta minutos de partido. Supo aprovechar que Pluim retenía la atención de ambos centrales para entrar desde la segunda línea a posiciones de remate. De hecho así fueron sus dos goles, parecía indetectable para los defensores rivales.
Pero el mejor fue el delantero centro, el ya mencionado Pluim. Con el partido ajustado distraía a los centrales y generaba espacio para sus compañeros. Pero con el 1-2 creció y decidió que era su momento, simplemente. Olió la sangre de un tocado PSV y empezó a participar en el juego. Apoyos más cortos y otros más largos, juego de espaldas, aperturas a las bandas, sensación de amenaza en el área... parecía mucho más que no un delantero que sólo había marcado un gol en la Eredivisie en los dos últimos años. En un córner llegó su gol, con un magnífico cabezazo. El primero de la temporada.
Pluim cerró el partido en el minuto 63 y luego vino el esperpéntico final de un PSV incapaz de batir a un Diederik Boer tocado por una varita mágica, porque paró todo lo que llegó, tanto de manera voluntaria como involuntaria y fortuita. Fue una bonita recompensa para un portero que lleva 12 años en la institución y que además tiene un dedo menos en una de sus manos desde que es un niño.
El próximo sábado el PEC Zwolle jugará su siguiente partido y posiblemente vestirá su ropaje habitual, el de un equipo modesto que tampoco encaja muchos goles pero que hasta este viernes había sido incapaz de anotar tres en un mismo partido. Difícilmente jugará a un nivel similar el próximo sábado, ni en cualquier otro partido de esta temporada, pero jamás olvidarán la noche del pasado viernes. Ese día simplemente se creyeron potenciales campeones de Europa.
realmente fue toda una sorpresa,jamas lo imaginé,pero por esto el fútbol es tan popular y masivo,en una noche cualquiera el mas chico le puede hacer la gracia al mas poderoso y grande;además esto no le viene nada de mal a la eredivisie,en la que,la diferencia entre los equipos que pelean por el título y los que luchan por salvarse es demasiada.
ResponderEliminarSaludos y muy buena columna,me gustó mucho.
Sin duda. A mí lo que más me sorprendió fue cómo ganaron y el campo donde lo hicieron, em impacto muchísimo su actuación. ¡Muchas gracias Sebastián!
ResponderEliminarBrutal partido del zwolle en un estadio grande y ganando como un grande, pero ahi se ve la magia de este deporte que es tan grande. Vi el partido de la primera vuelta entre el zwolle y el psv y jamas pense que pudiesen hacer el partido que hicieron el sabado.
ResponderEliminarPD. Espero que puedan echar un vistazo a este blog de futbol que he empezado en el que en mi primer post hablo del partido de etiopia de ayer.
http://futbol5continentes.blogspot.com.es/2013/01/el-descubrimiento-futbolistico-de.html