Descubriendo a los desconocidos

Este martes hemos descubierto muchas incógnitas. Hemos visto a un gran Weiss que puede ser una de las revelaciones de este Mundial. Hemos visto que la victoria de Nueva Zelanda a Serbia en un amistoso no sólo fue casualidad, sino que también es un equipo bastante organizado, aunque se basa en que Smeltz coja acierte su ocasión en ataque. Hemos visto como es la Costa de Marfil de Sven-Göran Eriksson, un equipo mucho mejor que esa selección desorganizada y decepcionante de la Copa de África de Angola. Y hemos visto como es esa selección de Corea del Norte, desconocida por casi todos, que aguantó 55 minutos ante la todopoderosa Brasil.

Primero vimos a Eslovaquia contra Nueva Zelanda. Lo mejor del partido fue el partido del joven Vladimir Weiss que a partir de hoy no va a ser llamado más como "el hijo del seleccionador". Su partido fue muy bueno, demostró ser rápido, bueno técnicamente, desequilibrante y animador del juego de su equipo. Pero su buen partido, el mejor de Eslovaquia junto a Sestak, no fue recompensado con una victoria, ya que el equipo de Nueva Zelanda, bien organizado, bastante seguro en defensa pese a conceder varias ocasiones durante el partido, consiguió meter un gol en el último minuto de juego, cuando todos dábamos a Eslovaquia como vencedor del partido.

Luego vimos el que tenía que ser el partido del día y uno de los mejores de la fase de grupos. Quizás no lo fue, pero estuvo entretenido. Me sorprendió muy gratamente la nueva selección de Costa de Marfil de Eriksson, muy sólida, actuando como un conjunto, con Zokora de central y Touré Yaya de mediocentro. Portugal no demostró demasiado nivel. Cristiano Ronaldo empezó bien, pero poco a poco fue desapariciendo del partido, como su equipo. Portugal tuvo sus opciones de ganar, pero en la segunda mitad Costa de Marfil se creció y el partido se fue partiendo y convirtiendo en un partido de ida y vuelta, con ambos equipos sufriendo por mantener el resultado. El córner botado por Costa de Marfil en el último minuto, sacado en corto para aguantarlo en el córner reflejó las intenciones de ambos equipos.

Y llegó el partido esperado, el debut de Brasil, el debut de Corea del Norte, el debut de Jong Tae-Se, el debut de una selección desconocida por todos, que se mostró organizada en la primera mitad, haciendo sentir a Brasil como una selección normal, con poca fuerza y con problemas para crear oportunidades. Corea tuvo alguna contra para marcar, pero en la primera mitad no puso en muchos apuros a Julio César.
En la segunda mitad la selección de Brasil empezó mejor, creando peligro, determinada a marcar pronto para no complicarse la vida. Y este empuje, estas ganas acabaron provocando el 1-0 de Maicon. Y con el gol de Brasil, el partido se acabó. Llegó el segundo y luego Corea del Norte trenzó una buena jugada para avisar a Brasil que el partido no se había acabado y poco después marcó el 2-1, uno de los goles más importantes de la historia del fútbol de Corea del Norte. Pero no fue suficiente. Corea del Norte perdió, pero dio una buena imagen e hizo lo que pudo.

Y mañana llega el turno de España y de Chile, esperamos ver una jornada de buen fútbol.